Los alcaldes del Bages han aprobado una declaración en la cual dan el pésame a la familia y amigos del joven vecino de Castellbell i el Vilar que perdió la vida en el descarrilamiento de Vacarisses y muestran su indignación por el estado de la red ferroviaria y la desatención tan de las empresas Adif y Renfe como del gobierno español. Así, en el marco del Consell d’Alcaldes del Bages han acordado pedir la constitución inmediata de una mesa de trabajo al más alto nivel, integrada por responsables del Ministerio de Fomento, la empresa estatal Adif y Renfe, el Departament de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat de Catalunya, y responsables de los Consells Comarcals y los municipios por donde pasa la línea R4 con el objetivo, que en el plazo de 6 meses se concreten y programen de una vez por todas, las inversiones incumplidas por parte del gobierno español y reconocidas por el propio ministro de Fomento en sede parlamentaria.
Según muestran los alcaldes a través de un comunicado, el texto acordado repasa los años que "los agentes sociales, económicos y políticos del Bages sumamos esfuerzos y voluntades para conseguir que nuestra comarca disponga de una red de comunicaciones digna", que nos una con buenas condiciones con Barcelona. Los alcaldes se muestran "cansados de escuchar anuncios de inversiones millonarias a la red de Rodalies de Catalunya por parte del gobierno español que después nunca se materializan y estas inversiones se destinan a otros proyectos".
El Pla d’Infraestructures Ferroviàries de Barcelona 2008-2015 fue aprobado por el Consejo de Ministros del 20 de febrero de 2009 y preveía inversiones de 4.000 millones de euros que nunca han sido ejecutadas. También en noviembre de 2013 la ministra Ana Pastor anunció un plan de choque de 306 millones de euros para resolver las actuaciones más urgentes antes del 2016. Una promesa que cinco años después tampoco se ha cumplido. Finalmente en marzo del 2017 el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, anunció un plan de inversión en infraestructuras a Catalunya centrado en Rodalies y el Corredor Mediterráneo, con una previsión de 4.000 millones de euros.
En este sentido, los alcaldes consideran que esta situación hace que Manresa y la comarca del Bages tengan un servicio ferroviario absolutamente deficiente y mal conectado con la capital del país, hecho que resta competitividad al territorio y supone una situación inaceptable en pleno siglo XXI.
El Consell d'Alcaldes también ha acordado solicitar en primer lugar a la empresa estatal ADIF que se lleven a cabo todas aquellas actuaciones que sean necesarias para garantizar la seguridad de toda la infraestructura y recuperar el servicio de tren entre Manresa y Barcelona con carácter de urgencia, y en segundo término que el Estado español, y en concreto en el Ministerio de Fomento, haga las inversiones necesarias a la línea R4 con el fin de ofrecer un servicio competitivo, eficiente y seguro que una la capital de la comarca del Bages con Barcelona en menos de una hora.