El Departament de Drets Socials de la Generalitat ha sancionado con multas que suman en total hasta 108.000 euros una residencia de personas mayores de Vilassar de Dalt (Maresma), la Fundació Hospital Sant Pere, por "faltas graves reiteradas desde 2021" como dejar a los ancianos internos sin comida durante más de 15 horas, cometer errores en el suministro de las medicaciones e, incluso, darles productos caducados. También para funcionar sin disponer de una dirección colegiada. Lo ha avanzado este viernes La Vanguardia y lo ha confirmado la conselleria que encabeza Mònica Martínez.
El secretario general de Drets Socials, Raúl Moreno, ha asegurado en declaraciones al citado diario que las multas son "irrevocables" pero que se darán facilidades para el pago. "Aquí no se perdona nadie", ha sentenciado sobre la cuestión. La conselleria ha decidido reactivar el procedimiento y castigar la mala praxis de este centro porque a pesar de disponer de requerimientos reiterados por parte de Drets Socials, la residencia no resolvió las irregularidades detectadas hasta pasados varios años. Se trata de una residencia privada dirigida por un patronato del cual forma parte el Ayuntamiento del municipio, tal como admiten a la prensa fuentes del consistorio.
Descontrol horario por las comidas y encerrados en las habitaciones
Tal como ha publicado el rotativo, una de las faltas más graves que se detectó durante las inspecciones llevadas a cabo en el centro fue el descontrol en el horario de suministro de las comidas. Se constató que muchas veces solo pasaban dos horas y media entre el desayuno y la comida del mediodía. A su vez, muchos residentes se veían obligados a esperar tres horas para tener el desayuno. En esta línea, también ha trascendido que el gramaje de la comida era menor de lo que se requería y que tampoco se tenía en cuenta el valor calórico de las dietas. Aparte, los inspectores de la administración vieron que a menudo los ancianos tenían que permanecer en las habitaciones sin poder salir. Familiares de residentes habían denunciado algunas de estas situaciones.
Harán falta 25.000 plazas de residencias los próximos años
En Catalunya se necesitarán 25.000 plazas más de residencias y 20.000 profesionales más en los diez próximos años por el envejecimiento de la generación del baby-boom, según un estudio publicado este jueves. La investigación, realizada por la Unión de Entidades, con colaboración de la Asociación Catalana de Recursos Asistenciales (ACRA) y el Ministerio de Derechos Sociales, concluye que a corto plazo podría no haber bastantes profesionales para atender a las personas mayores si no hay mejora importante de la financiación pública.