Con el objetivo de desestacionalizar el turismo y no concentrarlo únicamente durante la temporada de nieve invernal, Andorra añade un gran proyecto de ocio: Unnic es el nombre del futuro casino del Principado que abrirá sus puertas el otoño que viene, según ha informado la sociedad adjudicataria, Jocsa, en una presentación pública. Según el presidente de Jocsa, Ventura Espot, se trata de un centro de ocio único, ya que no hay ninguna otra semejanza en el entorno, y "hará sentirse también únicos a los visitantes". Espot ha asegurado que supone un complemento que faltaba a la oferta turística andorrana y que no quiere hacer la competencia a otros atractivos turísticos, sino que es complementario: "Dará juego al país", nunca mejor dicho. La apuesta es fuerte: será una instalación de 10 plantas y unos 9.000 metros cuadrados, 3.500 de los cuales se destinarán al área de juegos, según ha detallado el arquitecto responsable del proyecto, Pere Espuga. Esta distribución de la superficie responde al concepto 80/20, que según ha explicado el consejero delegado de Jocsa, Marc Martos, es la fórmula que seguirá Unnic: un 80% de entretenimiento y un 20% de juego. Así, los responsables del proyecto quieren que se convierta en un centro de ocio, donde, además del juego, se ofrezca otro tipo de oferta de entretenimiento, como espectáculos y gastronomía, con chefs locales y el coctelero Javier de las Muelas (Dry Martini). En este sentido, se trata de un "proyecto estratégico" que contribuirá a la desestacionalización del turismo y se calcula que el primer año recibirá a unos 270.000 visitantes.
200 nuevos puestos de trabajo
La inversión para hacer Unnic, 100% privada, es de 25 millones de euros, incluyendo la construcción, el equipamiento interior y la formación del personal, entre otros aspectos. El consejero delegado de Jocsa ha señalado que se prevé la creación de unos 200 puestos de trabajo directos y 500 más de indirectos. La arquitectura también formará parte de la oferta de Unnic: se ha diseñado un edificio "emblemático" que se integra en el entorno, el centro de Andorra la Vella. El arquitecto Espuga, también responsable de edificios destacados del país como la sede del Consejo General o de la Justicia, ha definido la fachada como "abstracta, elegante y atemporal". El edificio conectará la calle Prat de la Creu, donde se ubica el casino, con la avenida Meritxell mediante un ascensor y una plaza pública que ampliará la actual plaza del Poble. También ha intervenido el arquitecto Manuel Clavel, responsable de edificios icónicos como el Mix Restaurant Dubái, Odisseu o el Miami Museum Garage, que ha asegurado que la fachada es "una metáfora del paisaje de Andorra". Clavel ha manifestado que Unnic se ha diseñado para competir a nivel internacional y que es "una reflexión de qué significa" Andorra.
Quieren superar la crisis de la covid
Por su parte, el ministro Portaveu, Eric Jover, ha celebrado en declaraciones a la prensa que el proyecto avance y ha recordado que desde el Ejecutivo hace tiempo que defienden que "puede ser un elemento más de diversificación de los atractivos de Andorra". Asimismo, ha señalado que durante los meses que quedan para su apertura, hay que preparar "las estructuras necesarias para minimizar los riesgos asociados al juego y en cambio maximizar los beneficios". En este sentido, ha destacado que tanto desde el Cuerpo de Policía como del Consejo regulador del juego ya se trabaja para evitar problemas relacionados con la ludopatía y el blanqueo de capitales, entre otros. El otoño es la estación marcada aunque ya se han aventurado en dar más detalles. La finalización del Casino Andorra está fechada para el 4 de septiembre del 2022, si todo va según el previsto. Según el Govern de Andorra, el casino tiene que ser un elemento más para ayudar a impulsar la actividad económica del país y aumentar el atractivo después de la crisis de la pandemia para el coronavirus. Cuando la infraestructura esté lista, la agencia local del juego CRAJ (Consejo Regulador Andorrano del Juego) solicitará el permiso de licencia de apertura. Con respecto a la duración de la licencia, se han concedido 17 años desde el momento de la apertura efectiva del casino. Una vez finalizada, el regulador establece la posibilidad de renovar la licencia.
Cuando el Consejo Regulador del Juego de Andorra (CRAJ) decidió iniciar el proceso de licitación para la apertura de lo que sería el único y primer casino del Principado, recibió hasta 13 propuestas de operadores con gran peso internacional. Una vez abierto el concurso, en el 2018, los trece proyectos provenían de operadores de máximo nivel. Entre las propuestas, destaca CIRSA, propietaria de Sportium, uno de los principales casinos y casas de apuestas en línea de España. Otros proyectos provenían de los malayos de Genting a través de su filial británica; el grupo francés Partouche; Mercury; y Casinos Austria AGO, CASAG, que se ha visto envuelto con numerosos escándalos. El ganador final, sin embargo, es la andorrana Jocs SA. Tenemos que recordar que hasta hoy, Andorra había sido especialmente estricta con respecto a la regularización de los juegos de azar. Si los residentes querían disfrutar del juego se tenían que desplazar hasta alguno de los casinos de España o Francia.