El curso escolar 2020-2021 "se retomará con normalidad". Así lo ha expuesto el vicepresidente y conseller de Economía, Pere Aragonès. A pesar de todo, ha detallado que será "excepcional" porque "nos encontramos en una emergencia educativa y tenemos que situar a los alumnos en el centro". Precisamente por ello, en una rueda conjunta al lado de los consellers de Educació, Josep Bargalló, y de Salut, Alba Vergés, Aragonés ha informado que para el curso que viene se hará una inversión extraordinaria de 370 millones de euros, de cuyos 233 irán destinados a la incorporación de personal docente y no docente. Se espera, de esta manera, incorporar a unos 5.000 profesionales más.
Para intentar hacer frente a posibles rebrotes y confinamientos, unos 103 millones de este paquete se destinarán a los recursos tecnológicos. El objetivo principal es la transformación de las escuelas.
Aragonès ha puesto de manifiesto que las escuelas se han tenido que adaptar en un tiempo récord. "Los servicios públicos no estaban preparados para hacer una conversión en 24 horas". Así, ha remarcado que las "crisis también son una oportunidad". Y aunque la inversión tecnológica se quería hacer de manera progresiva, la situación de emergencia ha obligado a cambiar los planes.
Los tres elementos básicos del curso 2020-2021
En su turno, Vergés ha remarcado que el curso se podrá reanudar en condiciones "de práctica normalidad" a partir de tres elementos básicos: hábitos higiénicos, grupos estables de convivencia y detección precoz de casos. Aunque la circulación comunitaria del virus se mantiene, la consellera ha remarcado que ahora se saben más cosas del virus.
Entre otras cosas, "menos del 1% de pruebas PCR confirmadas corresponden a menores de 15 años y solo un 8% tiene menos de 30 años". Por lo tanto, "la carga viral es menor que en las personas adultas. Un 99% tiene un cuadro leve o asintomático".
De esta manera, ha subrayado que el cierre de las escuelas se tenía que hacer con la información que se tenía en aquel momento. Ahora sin embargo, los datos demuestran que bajar la persiana "tuvo un impacto poco relevante en el curso epidemiológico".
¿Qué son los grupos de convivencia estables?
"La escuela es, para los niños, la segunda familia", ha comentado Bargalló. En este sentido, el conseller ha remarcado que lo peor que les ha podido pasar a los niños ha sido la ruptura con la escuela.
Así, la creación de grupos de convivencia hará que los niños puedan ir sin mascarilla. "La unidad de convivencia siempre será la misma. Los mismos alumnos y los mismos profesores que podrán tener contacto directo sin mascarilla".
En el caso que tenga que venir otro profesor o especialista que no tendrá contacto diario con este grupo, sí que se tendrán que tomar las medidas de protección, como la mascarilla y la distancia de seguridad.
¿Qué pasa si un niño tiene coronavirus?
Una de las dudas que más fácilmente pueden aparecer en relación a los grupos de convivencia es qué pasaría en un hipotético caso de positivo dentro de la unidad. En este caso, la consellera de Salut ha insistido en que todo el grupo tendrá que hacer cuarentena.
De esta manera, ha insistido en el hecho que, ante posibles síntomas, las familias no envíen a los niños a la escuela así como tampoco si se ha mantenido contacto con un posible caso de coronavirus.
La llegada de nuevos profesionales
Según el anuncio que ha hecho el Govern, se contratarán a unos 5.000 profesionales, docentes y no docentes. Este personal se incorporará al centro a partir del día 1 de septiembre pero los centros educativos ya sabrán a finales de julio cuántos profesores nuevos tendrán de cara el próximo curso.
Según Bargalló, a partir de este lunes mismo se empezarán a negociar con los sindicatos las condiciones que tendrán los profesores.