Un asteroide del tamaño de uno rascacielos pasará cerca de la Tierra este martes. Según las clasificaciones de la NASA, se trata de un NEO (Objeto Próximo a la Tierra en inglés), porque se acercará hasta 2,3 millones de kilómetros con respecto a nuestro planeta-- unas seis veces la distancia entre la Tierra y la Luna-- y de un PHA (Asteroide Potencialmente Peligroso), por la proximidad y su tamaño, que los astrónomos estiman que es de entre 330 y 740 metros. Se trata del asteroide 2022 RM4, descubierto este mismo año por los científicos del Panoramic Survey Telescope and Rapid Response System de Hawai.
Cerca, pero sin peligro
Un asteroide clasificado como NEO, objetos próximos a la Tierra, y como PHA, potencialmente peligroso, vuelve a pasar "cerca" -en términos astronómicos- de la Tierra, pero todavía muy lejos para que haya peligro: su aproximación máxima será este martes a las 18:26 h GMT, a una distancia de 2,3 millones de kilómetros. Conocido como 2022 RM4, este asteroide fue identificado por primera vez el pasado 12 de septiembre y tiene un diámetro estimado de entre 330 y 740 metros, según datos del CNEOS, Centro para el estudio de objetos próximos a la Tierra, de la agencia espacial estadounidense NASA. De los aproximadamente un millón de asteroides de los cuales se tiene constancia en nuestro sistema solar, 30.000 están catalogados como NEO (Near Earth Object). Esta clasificación implica que sus órbitas pasan cerca de la órbita terrestre. Hay otra catalogación, los Asteroides Potencialmente Peligrosos, PHA (Potentially Hazardous Asteroids), todavía más próximos a la Tierra. De estos se conocen unos 2.200, con órbitas próximas a la Tierra de unos 7,5 millones de kilómetros y con diámetros de más de 150 metros. A estos cuerpos se les hace un seguimiento más estricto. Fuentes consultadas por Efe señalan que el que nos visita mañana no supone ningún peligro potencial para la Tierra.
La NASA desvía asteroides
La NASA ha confirmado este mes de octubre que su nave DART consiguió desviar la trayectoria del asteroide Dimorphos, ubicado a unos 11 millones de kilómetros de la Tierra, en una prueba de estrategia de defensa planetaria. El administrador de la agencia espacial norteamericana, Bill Nelson, ha apuntado que, antes del impacto, Dimorphos tardaba 11 horas y 55 minutos en girar en torno a otro asteroide mayor llamado Didymos, con el que forma lo que se conoce como un sistema de asteroide doble. La nave, sin embargo, consiguió reducir esta órbita a 32 minutos: "Habría sido un éxito si lo hubiera acortado solo unos 10 minutos, pero la redujo más y modificó su trayectoria", han explicado después de alcanzar el objetivo de la primera misión de defensa planetaria.