El Centro de Integración de Datos (CID) ha anunciado en un comunicado este martes que todavía habría 89 personas desaparecidas a causa de la DANA que ha asolado el País Valencià. Es la primera vez que las autoridades dan una cifra oficial de desaparecidos. A los cerca de noventa desaparecidos en València hay que sumar el caso de tres personas a las que todavía buscan a estas alturas en Letur, Castilla-La Mancha.

Los datos recaudados por las oficinas ante mortem habilitadas por la Policía Nacional y la Guardia Civil, y la colaboración de los médicos forenses, corresponden a las denuncias donde los familiares han aportado diferentes datos y facilitado muestras biológicas que permitan la identificación posterior de sus seres queridos. Desde las oficinas hacen constar en el comunicado "que las denuncias de desaparecidos con expediente activo no equivalen al número total de desaparecidos que podría haber generado la tragedia", ya que puede haber casos de desaparición que no se hayan denunciado todavía.

Además, estos 89 casos activos por desapariciones denunciadas se tienen que sumar con el número de personas muertas a las cuales ya se les ha practicado la autopsia, pero están pendientes de ser identificadas, que ascienden a 62. Según el último balance del CID, que se ha cerrado a las 20 horas de este martes, los forenses han realizado en todo el episodio de la DANA, 195 autopsias a muertos y 133 están plenamente identificados, los mismos que han ingresado en la morgue de la Ciutat de la Justicia de València. De estas identificaciones, 119 se han conseguido por|para el análisis de huellas dactilares y las 14 restantes por el cotejo de muestras de ADN.

Las muestras biológicas de familiares son la herramienta más fiable para identificar a los desaparecidos

Para la identificación mediante perfil genético, la fiabilidad mayor está en las muestras biológicas de familiares, ascendentes y descendientes directos, así como la entrega de efectos de uso personal que pertenezcan al desaparecido, como un cepillo de dientes o una cuchilla.

Los familiares de desaparecidos también pueden aportar otros elementos y datos que pueden ayudar en el proceso de identificación como fotografías, descripciones personales y antropométricas, historiales médicos, radiografías, ropa o efectos personales, tatuajes, fichas dentales, operaciones quirúrgicas realizadas, uso de prótesis internas o marcapasos, entre otros. Todos estos datos y efectos personales de las víctimas se tienen que aportar a las oficinas ante mortem que ha desplegado la Policía Nacional y la Guardia Civil instaladas en las localidades de Albal, Alfafar y Algemesí, o las oficinas de la comandancia de la Guardia y la dirección de Policía en València.