El juez ha enviado el Fútbol Club Barcelona a juicio por el caso Neymar. Será una vista corta donde, de hecho, se dará conformidad al acuerdo al que han llegado las partes y por el que Sandro Rosell y Josep Mª Bartomeu, ex presidente y presidente del Barça, han quedado al margen de todo. Para ellos el caso se archiva sin responsabilidades ni antecedentes.
No sucede en este sentido como al club, que al margen de la multa económica que prevé el acuerdo, tiene la pena moral de aceptar la culpabilidad de un delito fiscal y queda por lo tanto con antecedentes, que lo ponen en una situación comprometida, si algún día se produjera otra irregularidad.
Según el abogado del club, Cristóbal Martell, los presidentes no cometieron ningún delito fiscal. En cambio, en el acuerdo el Barça admite su culpabilidad.
La pena es una multa de más de cinco millones de euros. El Barça ya pagó en su momento unos 14 millones de euros correspondientes al fraude de Hacienda que ahora ya está regularizado. El acuerdo prevé el archivo de caso para Bartomeu y Rosell y para el mismo Barça por la declaración de Hacienda de 2014.