Cuando hablamos de recetas el primero que nos viene en la cabeza son las recetas de comer, y cuando pensamos en un recetario nos lo imaginamos de recetas con explicaciones detalladas sobre cómo preparar platillos suculentos. El de hoy no es un recetario tradicional, y es que Los trucos de La Ordenatriz. Soluciones de la A a la Z para pequeños dramas domésticos, es un recopilatorio de más de 130 recetas y explicaciones sobre las manchas más rebeldes, los problemas de limpieza del hogar más comunes, las soluciones a la ropa desteñida... El Nacional.cat entrevista a Begoña Pérez, conocida en las redes, donde tiene 1,6 millones de seguidores en Instagram, como La Ordenatriz. Begoña Pérez es la influencer de referencia sobre orden y limpieza, y tiene una comunidad de más de un millón de personas que, como si fuera una Biblia, acude a su perfil para buscar trucos para ordenar a conciencia y eliminar manchas. En el que es su segundo libro, La Ordenatriz nos demuestra que no hay nadie más ordenado que ella con este recopilatorio sobre las principales preguntas que sus seguidores le plantean diariamente; las soluciones, como no podía ser de otra manera, están ordenadas alfabéticamente. Hablamos de técnicas de orden y de limpieza con La Ordenatriz, Begoña Pérez.

¿Podemos tener la casa siempre ordenada?
No. La casa es para utilizarla, y cuando se utiliza, se ensucia y se desarregla. Lo importante es tener las cosas bien ubicadas y con lógica. Hagámoslo con un ejemplo: la cocina es una zona que se ensucia pero a la vez de arreglo fácil. Es decir, donde van las tazas, van las tazas, no nos pasa por la cabeza poner un bolígrafo, una libreta o una pila, porque cada cosa en la cocina está hecha para un uso muy concreto. Así pues, yo diría que el orden está a nuestro servicio y no nosotros al servicio del orden, si fuera al revés nos volveríamos locos.

El orden está a nuestro servicio y no nosotros al servicio del orden, si fuera al revés nos volveríamos locos

¿Usted es organizadora profesional, eso se estudia?
Pues sí, hay cursos especiales, que es como yo empecé, gracias a otro perfil en las redes. Ella se llama Vanesa y su perfil es @ponorden, de hecho, Vanesa, es discípula directa de Marie Kondo!. Ella pudo ir a los Estados Unidos y hacer su curso de 15 días, una cosa que yo no me pude permitir e hice la reflexión: 'yo quiero ser organizadora profesional, eso cómo se estudia?, cómo se trabaja?'. Fue en aquel momento que vi que ella ofrecía un curso precisamente de eso. La parte buena de este curso es que cada uno saca lo que más le conviene, no todo el mundo después se ha hecho organizador profesional.

Seguro que muchos padres y madres agradecerían que fuera una asignatura obligatoria en el colegio
Sí, sí, y tanto. No llevarlo a aquella asignatura que se hacía antes que se llamaba 'hogar', de eso ya hace demasiados años, pero sí una asignatura de estilo de vida. Es decir, una materia escolar que fuera sobre ahorrar o sobre ecologismo. Considero que sería muy buena idea, porque aunque parezca fácil la vida demuestra que no todo el mundo lo pone en práctica.

¿Usted era ordenada de pequeña?
No en exceso, era normal, no puedo decir que fuera desordenada porque no sería verdad. Eso, de hecho, me ha enseñado la gran diferencia entre el verbo 'ser' y el verbo 'estar'. Una cosa es ser desordenado y la otra cosa es estar desordenado. Y no todo el mundo tiene las mismas necesidades, cada uno tiene sus procesos de vida y a unos nos hacen falta unas cosas y a otros unas diferentes. No te harán falta las mismas cosas a ti que a mí, hay una diferencia de edad. Hay muchas circunstancias que nos delimitan, no nos definen, pero sí que nos delimitan. Entonces, es cierto que cuando me di cuenta de eso, dije: 'A ver, no soy especialmente desordenada, pero tampoco soy especialmente ordenada', pero creo que eso se puede aprender y se puede enseñar. Y con eso estamos!.

Begoña Pérez, La Ordenatriz, en su entrevista para El Nacional.cat / Foto: Eric Andrés

A Usted la han comparado en muchas ocasiones con Marie Kondo
¡Me parece un gran halago, pero no le llego ni a la suela del zapato!

¿Cree que los métodos de organización de Marie Kondo son aplicables a nuestra sociedad? Ella predica mucho el minimalismo...
Mirad, yo me he leído su libro muchísimas veces porque en la primera lectura no percibes lo mismo que en la segunda o, incluso, en la cuarta o la quinta. La primera vez que lo leí, y vi que dice aquello de 'tenemos que agradecer en la planta su existencia, lo cogemos, lo abrazamos...', pensé que Marie Kondo había perdido la cabeza, porque nuestra mentalidad nos hace ver las cosas como cosas materiales, sin vida, a pesar de saber que la planta tiene vida, es un ejemplo. Pero es que ella va más allá. Y leo el libro otra vez y entiendo que, ciertamente, cuando agradeces la existencia de las cosas que tienes porque ya no te hacen servicio, tiene sentido.

¿Por qué tiene sentido despedirse de nuestras pertenencias?
Porque lo sueltas, porque así ya no te arrepientes de haberlo soltado. Eso pasa mucho a la hora de hacer el cambio de armario, o cuando damos unos pantalones, o un bolso que nos ha costado mucho dinero. Es igual, si ya no te lo pones, no te focalices en lo que ha costado porque hace diez años que no lo luces, se lo das a tu vecina que tantas veces te ha dicho que le gustaba. Marie Kondo lo explica muy bien, puede parecer radical pero es cierto. Y ya va bien que sea radical porque de mutuo propio nunca diremos: 'mira, en lugar de cinco pantalones negros ya me va bien tener solo tres'. Parece lógico y fácil, pero cuando se trata de uno mismo no lo es, el corazón te dirá que no pasa nada por tener cinco pantalones del mismo color.

En su nuevo libro, Los trucos de La Ordenatriz. Soluciones de la A a la Z para pequeños dramas domésticos, organiza alfabéticamente sus trucos. ¿Pensaba en un manual sencillo que fuera de fácil consulta el día a día?
Este libro tiene un motivo para existir muy sencillo: me parecía que en Instagram mucha gente me preguntaba trucos y, muchas veces, eran los mismos, y necesitaba encontrar una solución. A ver, que yo sigo contestando a todas las dudas que puedo y lo seguiré haciendo porque me encanta, pero quizás me han pedido muchas veces por una misma mancha de grasa, pues lo plasmo en un libro de fácil acceso. Podríamos decir que como Nelson Mandela, 'yo tenía un sueño', que era poder responder a todos mis seguidores. Un libro es finito, tiene principio y final, y he conseguido reunir la mayoría de consultas que he recibido a lo largo de los años.

Yo tenía un sueño, poder responder a todos mis seguidores, y en este libro lo he conseguido

¿Usted utiliza productos que son fáciles de encontrar, qué básicos no pueden faltar en el armario de la limpieza?
Lo que os diré parecerá una obviedad, pero la gente se sorprende todavía ahora: jabón. Eso pasa porque cuando pensamos en manchas complicadas lo primero que nos viene a la cabeza son productos como el bicarbonato, el percarbonat, la laca del pelo, una fórmula mágica... pero no, el básico de los básicos es el jabón. El jabón es lo primero que lo limpia todo y está al alcance de todo el mundo, una pastilla de jabón tiene que estar en todas las casas. Primero aprendamos a utilizar el jabón, como aclararlo, como aplciar-lo y después ya pasamos a otro nivel.

¿Si dominamos el jabón ya podemos hacer más ciencia con productos?
Sí, productos como el bicarbonato, el vinagre, el percarbonato o la laca son productos muy interesantes que nos ayudarán mucho.

¿Qué mancha se le resiste?
La lejía. Si la lejía cae en color, que no es una mancha, es una decoloración, eso ya no se puede recuperar.

Si la lejía cae en color ya no es recuperable

¿De dónde vienen sus trucos? ¿hace experimentos en casa?
Pues un poco de todo, porque hay técnicas que no era consciente que conocía. Se tienen que hacer pruebas, yo sabía que el jabón puede disolver una mancha, pero quizás decolora entonces mejor hago pruebas con otro producto, o no, porque el problema es el material de la superficie donde lo aplico. Claro, si estamos delante de una mancha en una piel, que no impregna, por lo tanto en lugar de jabón puedo probar con un aceite, a espera, que el aceite además hidrata. Con eso quiero decir que intento diferentes cosas porque una mancha nunca es la misma. También tengo que decir que hago muchas pruebas con amigas cuando tienen manchas en casa.

Usted ha explicado en más de una ocasión que la muerte de su padre fue un punto de inflexión
A mí me cogió por sorpresa a pesar de no ser una sorpresa porque tenía una enfermedad diagnosticada desde feian muchos años. Sabíamos que llegaría el final y sin embargo viví un luto de dos años, como todo el mundo. Entonces qué pasa, estoy de duelo, tengo siete hijos, sanos, y empiezo a ver que no llego a los médicos, que no recuerdo qué he comprado ropa de uniforme y pasados seis meses vuelvo a comprar lo mismo porque no lo he encontrado; estoy desordenada. El luto me provoca desorden mental, me desordena la mente. Me falta mi padre, me caigo y me doy cuenta que el orden mental influye en el orden material, el orden exterior. Si uno no está ordenado no es capaz ni de trabajar bien.

Begoña Pérez, La Ordenatriz / Foto: Eric Andrés

¿Tiene seguidores hombres? ¿En las redes faltan perfiles de hombres que enseñen a ordenar y quitar manchas?
Eso siempre es muy mejorable, sí. Ahora bien, realmente creo que lo que falta son perfiles que den valor a las cosas, al hogar y a la familia. Para mí, limpiar una camiseta quiere decir que mi hijo vaya bien, tengo siete hijos y quiero que vayan bien. Pero eso no quiere decir que en mi vida no haya momentos de desastre, los hay y también me tengo que querer de esta manera. Yo fallo como madre y a veces no comemos tan bien porque se me ha agarrado el arroz y porque estoy con 40 cosas en la cabeza, y cuando hablo de mí, hablo igual de mi marido, me da igual el género.

¿Su fórmula mágica para qué sirve? Seguro que alguna vez se ha planteado patentarla
Yo ya he dado muchas veces la fórmula mágica, pero sí que me han dicho que la tendría que patentar. De hecho, se trata de una fórmula de toda la vida, que me la hizo llegar una amiga que la había sacado de otra persona de Instagram. Algunas personas me han llegado a decir que la fórmula estaba en Foro Coches desde el 2000!. Yo me la he hecho mía y de mi comunidad porque la he mejorado dando las cantidades exactas para que sea efectiva.

¿Qué lleva la fórmula mágica?
Medio litro de agua caliente, dos cucharadas pequeñas rasas de jabón en escamas y entre 50 y 60 mililitros de amoníaco. El jabón es en escamas porque tiene un tratamiento diferente al jabón normal y corriente, pero si tú me dices que tienes un jabón artesano que hace tu abuela, lo puedes utilizar igual, pero mejor solo una cucharada, porque suele ser un jabón que gelatiniza más. No nos ataquemos, utilizemos lo que tengamos, la marca no importa.

La fórmula mágica lleva medio litro de agua caliente, dos cucharadas pequeñas rasas de jabón en escamas y entre 50 y 60 mililitros de amoníaco

¿Qué usos le podemos dar?
La fórmula sirve para aquel sofá que no cabe dentro de la lavadora
, aquellos zapatos que no es bueno poner en la lavadora demasiadas veces porque se desengancha el pegamento, para aquella sillita de niño pequeño que tiene tanta suciedad que te planteas tirar... Por todo eso la fórmula es útil, nos ha dado muchas alegrías.

¿Para acabar hemos preguntado a los lectores de El Nacional.cat cuáles son las manchas que más les cuesta eliminar, le parece si respondemos algunas dudas? Empezamos por la mancha de aceite
Esta es de las más populares, la mancha de grasa de aceite la sufrimos todos, porque por suerte somos normales. Se puede tratar de muchísimas maneras en función de la superficie, lo explicaré más detalladamente así seguro de que resolvemos más dudas sobre las manchas de grasa. Te cae mermelada en la camiseta justo antes de ir al trabajo, la mancha se va impregnando, lo mejor es ir al lavabo y ponerle jabón líquido. Sí, irás a trabajar con la mancha, pero ya ibas a hacerlo, al menos con el jabón nos aseguramos de que en casa podremos quitar la mancha. Si la mancha de grasa está en una madera, podemos fregar con alcohol, que es un buen desengrasante. Ponemos el alcohol y al mismo momento un poco de polvos de talco, y lo dejamos actuar tres días, como mínimo. Si la mancha es de la grasa del tomate frito, puedes poner jabón líquido de manos y bicarbonato, que actúe media hora, y en la lavadora. ¿Grasa de bicicleta en los zapatos? la fórmula mágica es ideal en este caso.

La mancha de sangre también cuesta mucho a nuestros lectores
¡Esta mancha es muy divertida! agua fría, siempre, y si no tienes, pon hielo que hace que la sangre no coagule y evita que se incruste mucho en los tejidos. Si la mancha de sangre está por ejemplo en un colchón, podemos utilizar una valleta de microfibra, que con su capacidad electrostática y agua fría, absorvirà la sangre. El proceso que tendremos que repetir es: taponar, aclarar con agua fría, taponar, volver a aclarar con agua fría... e ir haciendo. Si todavía queda una sombra marrón en el colchón, ponemos una capa de bicarbonato, unas gotas de agua oxigenada y lo dejamos actuar media hora, lo cepillamos y ya está!. Si no se ha marchado, repetimos el proceso.

¿Los lectores quieren saber cómo se quita la mancha de vino tinto, es cierto que se marcha con vino blanco?
¡Sí, sí! ¡Si algo tenemos aquí es vino! y es muy cierto que la mancha de vino tinto se va con vino blanco y la de mora se quita con mora verde. Ahora bien, encuentra tú moras verdes!. Podría ser que poniendo vino blanco encima del negro la mancha no se marchara, entonces se puede probar con gaseosa, que también facilita el desincrustado. Si alguien no quiere gastar vino para quitar el vino, se puede probar con el percarbonato con agua caliente, porque a partir de los 40 grados se activa el oigen activo del percarbonato y la mancha se elimina muy bien.

¿Una última consulta, cómo se arregla el desteñido de la ropa de color?
El desteñido en ropa blanca es muy fácil: lejía. El desteñido en color, que tiene dos capítulos muy buenos en mi libro, se arreglará con laca de pelo. Compramos un tarro grande de laca, de la barata, porque la barata tiene un aplicador más potente. Ponemos laca muy abundante por toda la prenda de ropa antes de que esta se seque, justo cuando la sacamos de la lavadora, y otra vez hacia dentro con un vaso de vinagre de limpieza con dos puñados de sal en el tambor. Que sepáis que muchísima gente ya me ha dicho que tiene un bote de laca al lado del detergente.

¡Mucha gente ya tiene un bote de laca para el pelo al lado del detergente!

¡Muchas gracias por los consejos Begoña!
Un placer, muchas gracias a vosotros.

Aquí se puede recuperar la entrevista entera: