Los exámenes de la Selectividad 2023 está a la vuelta de la esquina. ¿Cómo te estás preparando para las PAU 2022? Las temporadas de estudio intenso son épocas en las que tanto tu salud física como mental se pueden resentir. Los dolores de cabeza, las bajonas, la irritabilidad, el estrés, la desmotivación, la concentración... todas estas consecuencias negativas de un exceso de estudio tienen más posibilidades de aparecer si repasas las lecciones encerrado en tu casa, sin apenas hablar con nadie y con la única compañía de la molesta pantalla de tu portátil. ¿Quieres estudiar para la Selectividad 2022 con mayor concentración y motivación? ¿Quieres absorber con eficiencia todo lo que repasas para estos inminentes exámenes de las PAU 2023? Entonces es imprescindible que vayas cambiando de lugar de estudio, y que algunas de estas ubicaciones sean exteriores. Así te da el sol, conectas con el resto de personas, el cambio de rutina te pondrá de buen humor... ¿Y sabes cuál es el mejor lugar exterior en el que puedes estudiar? ¡La playa!
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8 ventajas de estudiar en la playa para los exámenes de la Selectividad 2022
¿Te parece una idea demasiado alocada eso de ponerte el bañador, coger la toalla y estudiar unas horas en la playa para los exámenes de la Selectividad 2023? Aunque te parezca inicialmente un entorno extraño de estudio, la playa esconde todo tipo de ventajas para tu salud física y mental. Así que cambiar de aires y aprovechar el buen tiempo para repasar la lección al lado del mar te ayudará a estar preparado en todos los sentidos para los exámenes de las PAU 2023. Si todavía no has quedado del todo convencido, no te preocupes. Allá van 8 beneficios que no tenías en cuenta de estudiar unos cuantos días seguidos en la playa. Eso sí: si al final decides probar este plan, recuerda ponerte crema solar, protegerte de las medusas y demás peligros imprevistos, y, sobre todo, ¡recuerda pasarlo estupendamente bien!
1. Disminuirás notablemente tus niveles de estrés
El estrés y la ansiedad son dos grandes enemigos del estudiante: las preocupaciones impiden una concentración plena y aumentan las posibilidades de memorizar mal la información. Es por ello que es importante buscar lugares tranquilos para estudiar, como la playa. Si te dejas llevar por el suave ruido de las olas, entrarás en un estado de meditación que te relajará y exiliará todo atisbo de estrés. "Los ruidos lentos y apacibles funcionan para relajar hasta las personas más ansiosas", explica Orfeu Buxton, profesor asociado sobre salud del biocomportamiento en la Universidad del Estado de Pensilvania. "En el caso de las olas del mar, es como si te dijeran constantemente No te preocupes, no te preocupes, no te preocupes". Así que abandona el estrés de tu hogar o de la bulliciosa ciudad y busca la calma de la playa.
2. Estudiarás con mejor humor
Diversas investigaciones, como la realizada por la Global Healing Center, han descubierto que la exposición a determinados colores puede alterar tu estado emocional y psicológico. El color azul, por ejemplo, ofrece una sensación de calma y te pone de buen humor. ¿Y dónde puedes encontrar mucho de color azul? Exacto: en la playa, estudiando a la orilla del mar. "Observar el océano acaba cambiando a mejor las ondas cerebrales", explica Richard Shuster, psicólogo clínico, para Inc, portal especializado en mundo laboral y productividad. "Si estás alterado, pasar un rato en el mar invocará frecuencias cerebrales más tranquilas y positivas". Así que ya sabes dónde ir si llevas mucho tiempo preocupado por la posibilidad de suspender los exámenes de la Selectividad 2023.
3. Te enfrentarás al examen con una salud de hierro
Estudiar estresa, seguro que lo has comprobado en carne propia en más de una ocasión. El problema de unos niveles elevados de estrés durante un tiempo prolongado es que tu salud puede verse afectada, y no hay nada peor que encarar un examen muy enfermo. Te puedes desconcentrar y cometer un error garrafal. Evita esta situación estudiando de tanto en cuanto en la playa con tus pies desnudos tocando la arena; y es que conectar las plantas de tus pies con la arena crea un fenómeno mental positivo llamado earthing (que podría traducirse como "estar conectado a la tierra"). "Este fenómeno no solo te pone de buen humor al sentir que formas parte del planeta", explica la doctora Heidi Hanna, del Instituto Americano del Estrés, para Byrdie. "Los iones negativos que se encuentran en el aire marino entran en contacto con tus pies, reducen la inflamación y mejoran tu sistema inmune". ¡Se acabó eso de enfermar antes de un examen importante!
4. Recargarás energías al tomar un buen rato el sol
Si te decides por estudiar un par de horitas en la playa, puedes aprovechar el buen tiempo y tomar el sol. Una exposición adecuada a los rayos solares en la cara, brazos y piernas ofrecerá a tu cuerpo las ventajas de la vitamina D que ayuda, entre otras cosas, a prevenir infecciones, cáncer, a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, regula tu metabolismo... y, además, te sentirás con energías recargadas. Mantendrás la concentración para estudiar durante más tiempo de la habitual y acabarás la jornada con muy buen humor. Quizás hasta tienes suficiente motivación como para repasar la lección durante un ratito más.
5. Revitalizarás tu creatividad
La creatividad es una habilidad muy infravalorada por los estudiantes. Y es que no todos los exámenes de la Selectividad 2023 te piden que vomites la lección: muchas pruebas académicas te pidan que debatas, reflexiones, justifiques tus respuestas... Si te sientes poco creativo, ve a estudiar durante unos cuantos días seguidos a la playa y verás cómo de repente te brotan ideas de la nada. Según el biólogo marino Wallace J. Nichols, autor del libro Blue Mind (que explora la conexión entre el mar y la salud mental), estar cerca del agua no solo te calma sino que te ayuda a desarrollar tanto el lado innovador de tu mente como tu intuición. Lo notarás especialmente si estás estudiando alguna rama artística, o qu requiere que sepas improvisar durante el examen.
6. Reducirás las posibilidades de cometer fallos durante los exámenes
Si estudias en casa, es muy posible que repases la lección en los apuntes de tu portátil, o bien que te vayas despistando mirando las notificaciones de tu móvil. El problema de exponerte a pantallas pequeñas durante mucho tiempo es que tu función cognitiva (la que te ayuda a pensar) se va debilitando. Y esta función es clave para estar plenamente atento y concentrado durante los exámenes, ¡para no cometer errores debido a despistes tontos! Puedes evitar este tipo de situaciones apagando el portátil, cogiendo el libro y yendo a estudiar a la playa. Deja en casa tus dispositivos electrónicos y descubrirás que todos tus sentidos están más alerta que nunca, y que a tu mente no se le pasará ni un solo despiste. ¡No se te escapará nada cuando te enfrentes a los exámenes!
7. Llegarás al día del examen 100% descansado
Debido al efecto relajante de la playa (comentado ya en apartados anteriores), tiene sentido que estudiar en este lugar también te ayude a dormir mejor. Según un estudio realizado en 2015, la gente de media duerme 47 minutos más por la noche después de haber pasado un rato en la playa. Ten en cuenta que descansar es crucial cuando estás en época de exámenes. La fatiga y el cansancio ralentizan el proceso de absorción de información nueva y, en el día del examen, puede provocar que no prestes suficiente atención y no acabes de entender las preguntas (o que resuelvas de forma errónea). Así que si notas que el estrés por la llegada de las PAU 2023 te está produciendo algo de insomnio, visita un rato la playa para calmarte y coger sueño.
8. Reconectarás con tus compañeros de clase
Una de las desventajas de las temporadas de estudiar es que te acabas aislando al pasar tantas horas encerrado en casa. Una soledad excesiva puede conllevar depresión, desmotivación e incluso que te pongas enfermo. Aunque las sesiones de estudio en grupo no te resulten muy eficientes, considera quedar con tus compañeros para estudiar en compañía un rato en la playa. Además de aunar fuerzas para resolver dudas que no sepáis dilucidar cuando estáis solos, estrecharéis lazos afectivos cuando, al terminar de empollar, decidáis daros un baño, jugar a vóley, hacer una carrera en la arena... Quizás estudiarás menos de lo previsto, pero volverás a casa contento y con la sensación de estar conectado. ¡Tendrás las pilas recargadas para unos cuantos días más de estudio en soledad!