¿Os imagináis estar de vacaciones en una playa paradisiaca y recibir una botella con un mensaje en su interior? Por mucho de película que pueda parecer, eso es lo que le pasó a una familia de Florida que, un día cualquiera, mientras se estaba bañando al mar, vieron una botella flotar que contenía un mensaje en su interior. ¿Sin embargo, de dónde salía la botella? ¿Qué mensaje contenía? ¿Quién la lanzó y dónde? La respuesta a todas estas preguntas se hizo pública hace cuestión de días vía Twitter, donde a través de la cuenta del grupo de investigadores del Global change and genómico biogeochrmistry del CSIC, explicaron toda la historia.
El hilo explica punto por punto toda la historia que esconde la botella que se lanzó en diciembre del 2020 en medio del océano Atlántico, por el grupo de investigadores y de investigadoras del CSIC con la colaboración de investigadores de la Universidad de Vigo y del Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona. La doctora Gemma Casas, investigadora del IDAEA – CSIC de Barcelona, explica que la idea surgió después de días en alta mar, cuando un investigador de la Universidad de Vigo les comentó que sería interesante explicar el trabajo que hacen y el motivo por el cual es necesario. "Después de un mes en alta mar, viendo cada día el mismo paisaje, llega un momento que se hace bastante duro, y buscas hacer cosas que nos distraigan durante los ratos libres", apunta la doctora, que confiesa que hubo cierta controversia a la hora de lanzar por la cubierta del barco la botella de vidrio con el mensaje en su interior.
Una controversia que se explica justamente por el motivo del trabajo que ellos mismos desarrollan, recogiendo muestras de todo el océano para determinar los contaminantes orgánicos persistentes. "La botella la lanzamos una vez pasamos el ecuador, durante la expedición de la primera campaña del proyecto ANTOM, donde íbamos de Vigo (Galicia) a Punta Arenas (Chile) recogiendo muestras oceanográficas". Dentro de la botella, explica Casas, exponían quién eran, una fotografía del equipo entero y un mensaje del capitán del barco oceanográfico, B/O Sarmiento de Gamboa.
La sorpresa para todo el equipo de investigadores fue mayúscula al recibir un mensaje vía e-mail hace cuestión de días, donde una familia de Florida les explicaba que había recibido la botella hacía un año, en el 2021, con el mensaje en su interior. "La botella recorrió unos 7.000 km hasta llegar a la costa de Florida, desconocemos el motivo por el cual la tuvieron durante un año sin abrir, pero a todos nos ha hecho mucha ilusión que alguien la recibiera después de todo lo que debería recurrir en alta mar, fue muy emocionante" confesa Casas hablando en nombre de todo el equipo que lo celebraba por el grupo que tienen por WhatsApp.
¿En qué consiste el proyecto ANTOM?
El trabajo de los 15 investigadores que se encontraban a bordo del B/O Sarmiento de Gamboa, consistía al recoger muestras marítimas para determinar cuáles son los contaminantes orgánicos persistentes que se encuentran presentes en el ecosistema marino, dañando la calidad de estos y causando un impacto negativo en todas las poblaciones que habitan allí. Tal como afirma el vídeo explicativo del proyecto, "la huella química antropogénica del océano austral, es un espejo del estilo de vida de las sociedades modernas".
El proyecto ANTOM está incluido al programa Generación de Conocimiento del Ministerio de Ciencia e Innovación del Gobierno.