El calor ha llegado a picos máximos este miércoles por la tarde en el prelitorial catalán, Terres de Ponent, comarcas gerundenses y en el interior en Catalunya. Según el Servicio Meteorológico de Catalunya, ha llegado la ola de calor. Se han registrado 39 grados en Manresa, 38 en Tremp, 37 en Vic, Ripoll, Santa Coloma de Farners, Olot y Lleida y 36 grados en la ciudad de Girona, Banyoles, Berga y Cervera.

La tendencia seguirá al alza durante toda la tarde en todo el territorio catalán. Las temperaturas se moverán entre los 28 y 33 ºC en el litoral, entre los 31 y 36 ºC en el prelitoral central y sur, y entre los 33 y 38 ºC en el resto del país, si bien localmente será más alta en Ponent y en la Conca de Tremp.

Lleida superará los 42 grados

Lleida ha llegado este miércoles a los 38 grados de temperatura máxima y superará los 40 mañana jueves, según el servicio meteorológico de Catalunya, que prevé que en la ciudad se alcanzarán los 42 grados a las seis de la tarde del jueves.

Este miércoles, sobre la una y media del mediodía, un termómetro en la calle marcaba 36 grados en la sombra. Los sindicatos alertan de que hay que tomar medidas para prevenir golpes de calor sobre todo en trabajos al aire libre. Es el caso de trabajadores de la construcción, operarios municipales, trabajadores de la hostelería y del campo.

La Paeria ha activado la Fase 2 del Plan de actuaciones para prevenir los efectos de una ola de calor en el municipio de Lleida (POCSMLL 19), teniendo en cuenta el aviso por las previsiones de altas temperaturas en la ciudad en las próximas horas y días.

La activación de la Fase 2 del POCSMLL 19 comporta, por una parte, la revisión de los recursos humanos de los que dispone el departamento de Protección Civil del Ayuntamiento de Lleida:. Se trata de voluntarios que se puedan necesitar en una situación de superación de peligro alto por colaborar como apoyo para el transporte de personas vulnerables y que no disponen de condiciones adecuadas en el domicilio en locales municipales habilitados para hacer este tipo de alojamiento.

Beber sin sed

El doctor del Servicio de Medicina Interna y Especialidades del Hospital de Granollers, Esteve Llargués, ha pedido, en una entrevista en Efe, "beber aunque no se tenga sed" para evitar los efectos de la ola de calor que afecta en buena parte de Europa.

La cantidad de agua que se tiene que tomar cada día oscila, según Llargués, entre un litro y medio y dos litros, especialmente para las personas mayores de 65 años, que a menudo "pierden la sensación de sed". Además, evitar la exposición directa del sol, especialmente entre las 11.00 y las 18.00 horas, también es "esencial para evitar golpes de calor y quemaduras", según el experto.

El profesor de Medicina de la Universidad Internacional de Catalunya (UIC) ha recomendado que las personas que no puedan evitar la exposición al sol durante su jornada laboral, como los pescadores o los campesinos, "utilicen ropa fresca y sombreros para protegerse, aunque puedan creer que ya están acostumbrados, y realizar descansos diarios, en zonas de sombra bien ventiladas, hidratarse y mojarse".

Ante la perspectiva de que, por culpa del cambio climático, los episodios de calor sean cada vez más frecuentes e intensos, el doctor ha dicho que "se tendrán que adaptar ámbitos como el urbanismo, creando zonas frescas y de vegetación, así como más presencia de fuentes en las ciudades".

El cansancio, la lentitud o una sensación de apatía son algunos de los primeros síntomas de un golpe de calor, por lo que Llargués ha aconsejado "refrescarse a menudo y, si aumentan los síntomas, dirigirse a un centro de atención primaria"