Torredembarra tenía que acoger este fin de semana el primer Congreso Islámico Nacional en Catalunya, pero la organización habría comunicado este martes que cancelan todas las actividades por las supuestas amenazas y presiones ejercidas por grupos de extrema derecha según apunta el Diari de Tarragona. Según los organizadores, en los últimos días habrían recibido "una serie de amenazas y mensajes intimidatorios a través de redes sociales", con un "llamamiento a boicotear el acontecimiento, la organización de piquetes y una campaña de desprestigio por parte de ciertos partidos políticos".

Estas acciones han generado entre los promotores un «ambiente de inseguridad que pone en riesgo la integridad de los asistentes», entre los que aseguran se encuentran hombres, mujeres y niños llegados desde diferentes puntos del país para participar en este congreso. "La seguridad de los asistentes ha estado, es y será siempre nuestra prioridad", han indicado en un comunicado los organizadores que, después de analizar la situación, han determinado que "no podían garantizar la seguridad" necesaria para llevar a cabo el congreso en las condiciones adecuadas.

El congreso, que se tenía que celebrar los días 13, 14 y 15 de septiembre, no estaba exento de polémica, después de que se anunciaran ponentes que habían hecho declaraciones muy controvertidas, como Malik Benaisa i Yusuf Soldado. El primero es bastante conocido dentro de la comunidad religiosa, por dar una charla en la mezquita Ibn Rochd de Benzú,, que fue emitida por la televisión pública. Allí profería comentarios misóginos como que "las mujeres musulmanas no tendrían que salir a la calle si no es con las manos y el rostro cubiertos", además de criticar el uso de pantalones tejanos, zapatos de tacón o perfume, asegurando que utilizando estos complementos "se las podría considerar fornicadoras". El predicador se justificó asegurando que sus palabras iban dirigidas solo a las mujeres musulmanas. El segundo, era conocido antes de abrazar al Islam como Carlos Soldado, había sido confidente policial. En la actualidad se dedica a "castigar a los malos musulmanes" y a imponer la 'sharia', el sistema legal islámico.

Desde la organización han reiterado que "rechazan cualquier forma de violencia, radicalismo y extremismo, así como cualquier tipo de misoginia, venga de dónde venga". El objetivo, aseguran, "siempre ha sido crear un espacio de diálogo y reflexión, donde se puedan compartir ideas y fomentar valores positivos, en un entorno multiconfesional, diverso, seguro y respetuoso".