Un año más, la Carrera de la Mujer ha concentrado a miles de mujeres de todas las edades por el cáncer de mama. Concretamente, en esta edición han participado 30.000 corredoras, las cuales han recorrido ocho kilómetros desde la salida a la avenida Reina Maria Cristina y llegada a la avenida de Rius y Taulet. La misma organización ha limitado la participación en 30.000 personas, aunque contaba con una bolsa de reserva con más corredoras dispuestas a participar. En la edición de 2021 la participación fue de 18.000 mujeres, mientras que en su punto álgido, el año 2019, el acontecimiento había llegado a las 36.000 participantes.
La carrera tiene un carácter solidario y destina la recaudación a la lucha contra el cáncer de mama. Este año ha metido el foco en la parte metastásica de la enfermedad dando a conocer la Asociación Española de Cáncer de Mama Metastásico.
La Carrera de la Mujer ya es casi una tradición en Barcelona. Hace años que las calles de la capital catalana se tiñen de rosa con los millares de participantes que corren en solidaridad por la lucha contra el cáncer de mama. La alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, ha sido la encargada de anunciar la cuenta atrás del inicio de la carrera.
Una ola rosa en Barcelona
"Espero divertirme y darlo todo por ellas, porque son unas heroínas," ha declarado a la ACN Maria Antònia, una veterana de la carrera antes que empiezas esta. "Hace ocho años que la corro y para mí lo significa todo, es la mejor carrera que hago de todo el año", ha añadido. Entre otras veteranas, a la salida también había Cristina Ortiz, que este domingo ha corrido los ocho kilómetros de la prueba por quinta vez. Por su parte, Cristina ha celebrado que la edición de este año ha reunido "a muchísima gente". "La mayoría no somos corredoras, pero estamos aquí para luchar y para estar al lado de las que luchan", ha afirmado.
En la misma línea se ha expresado Maite, una habitual de la prueba, que ha explicado que participa en la carrera porque "es una cosa muy bonita". "Es un homenaje a todas las mujeres que han pasado por este proceso tan duro", ha sostenido.
La edición de este año ha reunido a muchas mujeres que iban acompañadas de sus hijas. Es el caso de Verònica Romero y Natàlia Pérez, una madre y una hija que corren la carrera desde que Natàlia era pequeña. "Es un ambiente muy emotivo, con mucha gente y con muchas ganas", han asegurado, a la vez que han reivindicado que participan "para colaborar en la causa y dar a conocer la lucha".