El catalán retrocede también dentro de los hogares catalanes. Los datos de la última encuesta que ha presentado el Govern así lo corroboran. Las estadísticas que recoge la Encuesta de Usos Lingüísticos de la Población 2023 muestran los pasos atrás que da el catalán como lengua inicial en casa y también expone el retroceso que experimenta con respecto a la transmisión intergeneracional. El número de personas que tenían el catalán como primera lengua en casa ha caído. El castellano también experimenta en este sentido un ligero descenso.
Si en el 2003 había 2.036.200 personas que lo primero que habían hablado en casa de pequeños era el catalán, veinte años después la cifra ha descendido hasta las 1.967.300 personas. El resto de años, las cifras habían sido las siguientes: 1.949.500 en el 2008, 1.940.000 en el 2013, y 2.010.400 en el 2018, eso quiere decir, teniendo en cuenta la última encuesta del 2023, que se ha producido un descenso de hasta 68.000 personas en los últimos 20 años.
Con respecto al castellano, las anteriores encuestas mostraban cómo aumentaba a lo largo de los años como la lengua que las personas afirmaban tener como primera lengua en casa cuándo eran pequeños. En el 2003 había en números absolutos 3.155.100 personas que así lo afirmaban; en el 2008, 3.389.000, y en el 2013, 3.448.500. La tendencia se cambió en la encuesta del 2018, cuando los números empiezan a bajar, pasando a 3.366.000. El descenso se confirma este 2023, con 3.335.400 personas que afirman que el castellano fue la primera lengua en casa.
El descenso del catalán y el castellano en los hogares catalanes contrasta con el aumento que experimentan otras lenguas. Si en el 2003 solo 185.400 personas decían que en casa hablaban de pequeños una lengua diferente del catalán y al castellano, las siguientes encuestas registraron un aumento progresivo: 509.500 (2008); 631.400 (2013); 687.700 (2018), hasta llegar a los 801.600 este 2023.
En cuanto a la combinación de catalán y castellano en casa como lengua inicial en casa también ha crecido. Los datos muestran, con respecto a la transmisión del catalán, que el uso de la lengua da pasos adelante entre abuelos y nietos. Ahora bien, eso no es suficiente para compensar la fuga que se produce en otras franjas de edad. Con respecto al castellano, va ganando peso entre los jóvenes, sobre todo de familias con padres nacidos fuera de Catalunya.
Datos preocupantes sobre el uso del catalán
La encuesta presentada este miércoles expone un conjunto de cifras alarmantes sobre el estado del catalán en Catalunya. Aunque el conocimiento de la lengua se mantiene estable (el 93,4% de la población lo entiende y el 80,4% lo sabe hablar), la presencia en el uso habitual ha bajado. Actualmente, un 32% de la población de 15 años o más afirma utilizar el catalán como lengua principal en el día a día, una cifra inferior a la de años anteriores. En el ámbito comercial y de servicios, el catalán se utiliza de manera habitual en menos del 40% de las situaciones, sobre todo en grandes ciudades. En cambio, el uso del castellano se ha consolidado como la lengua de referencia en la mayoría de interacciones sociales y comerciales.