Catalunya ha perdido la paciencia con Rodalies. Centenares de usuarios desencantados han salido este sábado a la calle para reclamar soluciones "inmediatas" ante el caos ferroviario. "Hemos llegado al límite de nuestra paciencia", ha señalado el portavoz de Servei Digne, una de las entidades convocantes. El retraso de los trenes, la acumulación de incidencias, y las habituales suspensiones del servicio durante las últimas semanas, y años, ha reunido indignados de todo el país en nueve ciudades diferentes para decir basta y exigir "un servicio ferroviario digno". Las concentraciones han tenido lugar a las 12.00 horas del mediodía en las estaciones de Tarragona, Lleida, Tortosa, Valls, Segur de Calafell, Molins de Rei, Cardedeu, la Garriga y Figueres y han movilizado a más de medio millar de afectados.
Los usuarios denuncian que el mal servicio de Rodalies y de los trenes regionales en Catalunya se ha "cronificado" y ya forma parte del día a día de los pasajeros. "Nuestra vida depende de un medio que tendría que ser el futuro y se ha convertido en una condena", han lamentado en un manifiesto al final de la protesta tarraconense. Dignitat a les Vies, la Associació per la Promoció del Transport Públic, Salvem l'R2 Nord, 'Perquè no ens fotin el tren', Trens Dignes Ebre-Priorat, Defensem el tren de l’Empordà y Propera parada Valls han sido las entidades convocantes.
Exigen revertir la "desinversión histórica"
Los afectados señalan que el problema ferroviario en Catalunya es debido a una "desinversión histórica" y alertan de que habrá nuevas movilizaciones si los gobiernos no ofrecen soluciones manera inmediata a los usuarios. "En Molins de Rei hace cinco años que tenemos paradas unas obras —presupuestadas en 6,2 M EUR— para teóricamente hacer la estación más accesible", ha espetado Lluís Carrasco, miembro de la plataforma de Promoció del Transport Públic (PTP), a modo de ejemplo.
A pesar de todo, los manifestantes son conscientes de que tardará "muchos años" en revertirse la situación, que es especialmente grave en las líneas que enlazan el Ebro con Tarragona y Barcelona. "En 7 años no se revierten 30 de desinversión", ha sentenciado uno de los organizadores. Precisamente por eso, varios usuarios presentes en la concentración han asegurado que el mal funcionamiento de los trenes ha provocado que hayan "tirado la toalla" con el transporte público y se han decantado por utilizar el vehículo privado para moverse.
Los afectados de todo el territorio, unidos
La portavoz de Trens Dignes Ebre i Priorat, Cinta Galiana, ha destacado "la unión" que las plataformas de usuarios han demostrado con estas movilizaciones. Este sábado se han manifestado unas 150 personas en Tortosa, un centenar en Molins de Rei, y unos setenta en la estación de trenes de Figueres. Las protestas también se han hecho en Valls, Segur de Calafell, Cardedeu y La Garriga, con gritos, consignas y protestas del mismo estilo que el resto. En ninguna de las concentraciones se ha detectado ningún incidente con los manifestantes.
Con respecto a Lleida, las protestas han estado más dirigidas al servicio de trenes regionales y Avant, que enlazan la capital del Segrià con Barcelona. Una cincuentena de personas se han manifestado delante de la estación de tren de Lleida para pedir un servicio ferroviario "digno". Los usuarios de los trenes Avant han exigido una nueva frecuencia a primera hora, poder viajar con el abono en más trenes AVE, abaratar los precios y acabar con "los retrasos y la falta de información".