Las lluvias de las últimas semanas han permitido al Govern dar un paso adelante y reducir las limitaciones de agua por sequía en diez áreas de Catalunya y levantar la emergencia por sequía en el embalse Darnius-Boadella, en Riudecanyes y en el acuífero Fluvià-Muga, que pasan a los escenarios de alerta, prealerta y excepcionalidad, respectivamente. De hecho, únicamente el último se encuentra todavía en situación de excepcionalidad del total de 18 unidades. Así lo ha anunciado este martes la portavoz del Govern y consellera de Territori, Habitatge i Transició Ecològica, Sílvia Paneque, en la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo, en un momento en que los embalses de las cuencas internas de Catalunya están por encima del 46% de su capacidad y ya hay 200 municipios sin ninguna restricción. "Estamos ante un proceso de desescalada de la sequía", ha afirmado Paneque.

El embalse Darnius-Boadella se ha situado con un volumen de 22,4 hm³, el doble que a principios del mes de febrero. Con respecto al de Riudecanyes, está por encima del 35% de su capacidad y se sitúa en niveles de prealerta. Por último, el acuífero Fluvià-Muga pasará de emergencia a excepcionalidad porque también han mejorado sus niveles.

No se da por superada la sequía

El Govern ha validado hasta diez modificaciones de estado este martes, un cambio radical en la situación de sequía que sufría Catalunya. El sistema Ter-Llobregat se mantiene en alerta, pero ya hay hasta ocho ámbitos en situación de normalidad: Anoia-Gaià, acuífero Carme Capellades, acuífero Plioquaternari de Tarragona, cabecera del Llobregat, cabecera del Ter, estanque de Banyoles, Mig Llobregat y Prades-Llaberia. Se mantienen en prealerta del Consorci d'Aigües de Tarragona y Riudecanyes. El resto de unidades continúa en alerta: las pertenecientes al sistema Ter-Llobregat, el acuífero Baix Ter, el embalse Darnius-Boadella, Empordà y Serralada Transversal. 

Esta es la propuesta que el Govern ha trasladado al Comitè Permanent de Sequera de l'Agència Catalana de l'Aigua, donde se ha analizado la situación tras las últimas lluvias. Las modificaciones se harán efectivas cuando se publique en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) la resolución del director de la Agencia, prevista para la próxima semana.

A pesar de las lluvias de las últimas semanas, el Govern no da por superada la sequía y continúa con las actuaciones previstas para no depender de la lluvia y disponer de más agua en el Alt Empordà. La obra de emergencia para aportar caudales de agua al río de la Muga a la altura de Pont de Molins, con una inversión de 6 millones de euros, ya está ejecutada. También en este mismo ámbito, la Agència Catalana de l'Aigua ha puesto a subasta la redacción del proyecto para construir una estación de regeneración de agua en Figueres, con el objetivo de que en el horizonte de 2027 se disponga de más recursos para el riego agrícola y la aportación de caudales ambientales. En el caso de las medidas en el acuífero del Fluvià Muga, las obras para construir cinco nuevos pozos siguen el ritmo previsto.