Las emisiones de gases de efecto invernadero han disminuido un 5,5% en el 2023 en Catalunya con respecto al año anterior, según los resultados de la Estimación Provisional de Emisiones de CO2e del Monitor público de emisiones de Catalunya. Esta estimación|estima muestra cómo el año pasado el país emitió 39,7 Mt CO2e, un 1,7% menos que en el 2021, cuando|cuándo las emisiones fueron de casi 40,4 Mt CO2e. Estos resultados muestran un cambio muy positivo con relación a los dos últimos años, después de que el año 2020 hubiera una gran bajada, a menudo relacionada con el confinamiento y la reducción de la movilidad por la pandemia.
Los datos de la estimación|estima apuntan a una reducción del consumo de combustibles fósiles, con una reducción de un 9% en el gas natural y de un 2% en los carburantes para el transporte por carretera (gasolinas y gasóleo). Por otra parte, la electricidad producida con tecnologías que generan emisiones, básicamente ciclos combinados y cogeneración que utilizan gas natural, se ha reducido en un 16%.
La estimación expone la reducción, pero profundiza en las causas. Según la ACN, algunos expertos apuntan que detrás de la reducción de gases de efecto invernadero está la mejora de la eficiencia industrial, el consumo de energía más responsable en los hogares, cambios en los patrones de movilidad, cambios tecnológicos, una mayor participación de las energías renovables y el incremento del autoconsumo.
Todavía lejos de los objetivos
La Estimación Provisional de Emisiones de CO2e de Catalunya 2023 aporta buenas noticias, pero con un punto agridulce. Por una parte, es muy positivo haber sufrido una reducción de las emisiones el año pasado, sin embargo, no es suficiente. En el texto se recoge que todavía está "muy lejos" de alcanzar con garantías los objetivos establecidos a los compromisos del Acuerdo de París y las recomendaciones científicas del IPCC. Según estos últimos, las emisiones no tendrían que superar las 24,8 Mt CO2e, un 37% menos que las emisiones del 2023, y tendrían que reducirse más del 6% anualmente desde el 2024. A pesar de haciéndolo, sin embargo, no se cumpliría el Acuerdo de París, ya que establece que los países desarrollados tienen que hacer una reducción de emisiones más rápida que la media global. Aparte, la Generalitat ha calculado que para trasladar a Catalunya el nivel de ambición del paquete Fit to 55 de la Unión Europea, las emisiones en el 2030 no tendrían que superar las 28,2 Mt CO2e, un 29% por debajo de las emisiones del 2023.
Siguiendo la línea de todo el Estado
El pasado mes de diciembre, se expuso que el Estado español también había reducido las emisiones de gases de efecto invernadero por primera vez desde la pandemia. Sin embargo, en el resto del estado el porcentaje que se ha reducido es ligeramente menor: 5,3%.
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