El cierre definitivo del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) decretado por el Ajuntament de Barcelona y vulnerado sin ningún tapujo por parte del Ministerio del Interior español ha provocado un enfrentamiento directo entre la vicepresidenta del gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, con un intercambio de reproches sobre cuál tiene que ser la situación de esta polémica instalación.
De hecho, desde el momento de que el miércoles el Ajuntament anunció la clausura definitiva del CIE que el Gobierno español se ha mostrado dispuesto a saltarse esta prohibición, de manera que el jueves por la noche el Ministerio del Interior obvió las amenazas de precinto del espacio y decidió reabrirlo una vez acabadas las obras de rehabilitación, en un claro gesto de desacreditación de la decisión municipal, que había decidido impedir la reapertura por una cuestión de licencias.
Proceso de precinto
Así las cosas, y a pesar de las amenazas de la Casa Gran de poner en marcha un proceso de precinto de la instalación, este viernes mismo se ha visto entrar a varias dotaciones policiales, sin que por el momento se haya comprobado si vuelve a haber internos, que sería el detonante para proceder al precinto del CIE.
En este contexto, Sáenz de Santamaría ha asegurado, en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que su Gobierno -en funciones- se limita a "cumplir la legislación española", que incluye la posibilidad de "privar de libertad" a los inmigrantes sin regularizar. De hecho, la vicepresidenta ha añadido que la legislación fue impulsada por el gobierno Aznar, pero que el PSOE no hizo ningún gesto para derogarla durante el mandato Zapatero.
Para concluir su defensa del CIE, Santamaría ha recordado a Colau que al Ajuntament de Barcelona "no le corresponde la competencia de decidir cómo se gestiona o no la política de inmigración en nuestro país". "Todo el mundo puede hacer la política de discursos que crea conveniente, la señora Colau puede salir y decir todo lo que quiera, pero no tiene más competencias que las que corresponden a un ayuntamiento", ha remachado la representante del Gobierno español.
Ada Colau responde
Acto seguido, la alcaldesa de Barcelona ha decidido responder vía Twitter, recordando a Santamaría que la Moncloa "puede decir lo que quiera", porque el Ajuntament tiene "competencias en materia de licencias y también de derechos humanos", unas atribuciones, ha añadido, que el equipo municipal de Barcelona en Comú está decidido a "ejercer". De hecho, el consistorio está a la espera de un informe técnico sobre la presencia o no de internos en el CIE para poner en marcha el proceso de precinto de la instalación.
Moncloa pot dir el que vulgui, però tenim competències en matèria de llicències i també de DDHH, i les exercirem https://t.co/JLqDrZ7QRq
— Ada Colau (@AdaColau) 8 de juliol de 2016