La Iglesia catalana movilizó durante el 2023 más de 65 millones de euros para atender necesidades asistenciales y pastorales, sumando la actividad de las diócesis, de Càritas y Manos Unidas, según las cifras de la memoria anual de las diócesis con sede en Catalunya. Se beneficiaron de estas ayudas 877.000 personas en situación vulnerable. El balance lo han presentado este jueves el cardenal Joan Josep Omella, arzobispo metropolitano de Barcelona y vicepresidente de la Conferència Episcopal Tarraconense y el obispo de Lleida, Salvador Giménez.

¿Cómo se configuran las ayudas? Los obispados catalanes ingresaron en el 2023 un total de 141.357.810,28 euros. De esta cantidad, las aportaciones directas de los fieles sumaron 70.034.784,22 euros, que representan el 49,7% del total de ingresos. 39,1 millones se obtuvieron por aportaciones voluntarias de los fieles (27,8% del total de ingresos) y 30,8 millones por la vía de la X en la declaración del IRPF (21,9% de los ingresos). En el mismo capítulo de ingresos se contabilizan 19,9 millones por gestión del patrimonio y actividades económicas (14,1% del total); 9,5 millones por ingresos extraordinarios (6,8%) y 41,8 millones por otros conceptos (29,7%).

Aportaciones de los fieles

Los gastos de las diócesis catalanas ascendieron a 128.426.11,99 euros en el 2023. Los gastos destinados a tareas de atención a las personas, fueron en total de 26.768.448,76 euros en el mismo periodo. Eso significa que el 34% del total de 70 millones de ingresos mediante las aportaciones de los fieles se dedicaron a actividades caritativas y asistenciales. A estos 26,7 millones hay que sumar el gasto anual de las entidades sociales vinculadas a los obispados: 40,4 millones de euros de las Càritas diocesanas y 3 millones de Manos Unidas. Se tiene que sumar también la actividad propia de las congregaciones religiosas. En el 2023, más de 877.000 personas han recibido apoyo en los centros asistenciales que gestiona la iglesia diocesana. Estos centros prestan tanto atención sociosanitaria, como programas de acogida y acompañamiento a personas en situación de vulnerabilidad.

En el mismo capítulo de gastos, algo más de 48 millones de euros (34,10% del total) se destinaron a la conservación de edificios y gastos de funcionamiento; 25,6 a retribuciones del personal seglar (18,20%); 17,5 (12,40%) a retribuciones del clero; 9,1 millones (6,50%) a gastos extraordinarios y 2,3 (1,70%) en aportaciones a centros de formación. Se estima que el clero, los laicos y los voluntarios han dedicado un total de 3.591.069 horas a la misión pastoral y asistencial de la Iglesia.

En el cierre de la memoria, el presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, ha hecho un llamamiento a la colaboración de los fieles y la sociedad para mantener viva esta tarea: "No sabemos cuántos buenos samaritanos hay entre nosotros, pero sí el número de centros asistenciales y personas atendidas".

Bautizos y matrimonios

De acuerdo con la memoria, la Iglesia en Catalunya tiene 1.313 presbíteros, 159 diáconos permanentes, 60 seminaristas, 498 monjes y monjas de clausura, 3.773 religiosos y religiosas y 26 misioneros. También hay 4.097 catequistas, 6.052 profesores de religión, 2.524 voluntarios y agentes de pastoral de salud y 11.123 voluntarios de Càritas y 439 de Manos Unidas. Con respecto a las cifras en el ámbito sacramental, en el 2023 se celebraron en las diócesis con sede en Catalunya 12.835 bautizos, 9.651 primeras comuniones, 4.981 confirmaciones, 2.798 matrimonios, 4.242 unciones de los enfermos y 20.886 comuniones en los hospitales.