Cánticos como "Impuestos sí, abusos no" o "Manos arriba, esto es un robo" se han oído este jueves por la tarde en Sabadell (Vallès Occidental), donde más de un millar de personas se han concentrado para protestar contra la nueva tasa comarcal de tratamiento de residuos. Se trata de una nueva tasa agregada a la tasa municipal de residuos que ya se paga, y que se crea a partir de las directrices de la Unión Europea para que la ciudadanía se haga cargo de los residuos que genera y propiciar el reciclaje. Desde este 2024 los vecinos del Vallès Occidental tienen que empezar a abonar la tasa al Consejo Comarcal y, de hecho, la nueva factura con la carga impositiva añadida ha llegado ya a las familias de seis localidades vallesanas este mismo junio: en Rubí, Sabadell, Santa Perpètua de Mogoda, Sentmenat, Terrassa y Ullastrell. Aunque hace meses que se aprobó, muchos de los manifestantes valoran que no han sido debidamente informados, si bien están recibiendo ahora una carta, y aseguran que el aumento del importe a pagar los ha pillado por sorpresa.
La protesta, convocada a través de las redes sociales, ha reunido diferentes colectivos que reprochan a las administraciones públicas una falta de información con respecto al nuevo impuesto y el motivo de este, añadiéndose al malestar previo en un año en el que se han subido impuestos como el IBI, el agua o la tasa de residuos. La iniciativa se ha coordinado a través de las redes y ha contado con un Change.org, donde en solo tres días se han recogido más de 13.000 firmas para pedir la eliminación de la tasa. Los impulsores de la recogida de firmas consideran injusta la tasa y reclaman que busquen alternativas para sufragar el coste del tratamiento de los residuos.
Los vecinos que han asistido a la protesta, mayoritariamente de edad avanzada, han vertido bolsas de basura en la puerta del consistorio. También se ha escenificado la protesta con dos mujeres disfrazadas de basura. Incluso se han oído gritos contra la alcaldesa de la cocapital vallesana, Marta Farrés. Además de la concentración de este jueves, los organizadores han instado a los presentes a volver el martes 25 de junio a las 18.30 h, coincidiendo con el próximo pleno municipal. La recogida de firmas la ha impulsado a una vecina del Vallès, Lucía Quero, que exige alternativas "más equitativas y sostenibles" ante una carga que considera "injusta" para las familias "en un momento en el cual muchos luchan por llegar a final de mes".

Una nueva tasa por la gestión de los residuos
De las seis localidades del Vallès Occidental que implementan el nuevo impuesto, Ullastrell y Sentmenat han desplegado un protocolo que permite saber quién vierte qué en los contenedores, de manera que se aplica el importe que corresponde a cada familia. En el caso de localidades mayores como Sabadell, Terrassa, Rubí y Santa Perpètua de Mogoda no hay un sistema de control, de manera que se marca un criterio único y proporcional a cada unidad familiar. El importe extra aplicado a Sabadell es el 86% de la tasa municipal de residuos que ya se pagaba hasta ahora, siendo el más caro de todos porque es la ciudad donde menos se separa la basura para su reciclaje. La sigue Rubí, con un 57%, Terrassa, con un 56%, y Santa Perpètua, con un 41%. Todos los vecinos tendrán que pagar la parte proporcional que les corresponde. Cuanto más se recicle, menos se paga; y al revés. Los seis consistorios han delegado en el Consejo Comarcal el cobro de la nueva tasa, que se gestiona a través de la Diputación de Barcelona.

Vecinos, síndic y oposición alzan la voz
En los últimos días, varias voces de la sociedad civil vallesana se han manifestado en contra de la tasa, por sí misma o por las formas con la cual se ha implementado. La Federación de Asociaciones Vecinales de Sabadell (FAVS) ha anunciado que en el pleno del próximo 25 de junio presentarán una moción al respecto. "Consideramos que los impuestos son absolutamente necesarios para el mantenimiento del estado del bienestar, pero también defendemos que tienen que ser proporcionales, racionales y equitativos", afirman en un comunicado.
También se ha pronunciado el síndic de Sabadell, Josep Escartín, que según adelanta iSabadell prepara una actuación de oficio para ampliar unos plazos de pago que acaban el 17 de julio y que mucha gente desconoce, en parte porque todavía no han recibido la carta que se los anuncia. Se han sumado de igual forma varias formaciones de la oposición, como la Crida, ERC o el PP, que han manifestado su inquietud. La Crida, por su parte, ha entrado una petición al Ayuntamiento para iniciar las actividades de información y recogida de firmas en todos los barrios de la ciudad para parar la tasa y reformularla de manera equitativa entre la ciudadanía.