Han pasado más de 24 horas desde que a las 12.33 de este lunes se perdió más de la mitad de la capacidad de generación eléctrica en tan solo cinco segundos, y todavía no se han aclarado los motivos de este descenso repentino. Hoy por hoy, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha limitado a mantener todas las puertas abiertas, mientras que desde Red Eléctrica sí que han descartado la tesis del ciberataque. Durante este tiempo, han sido los expertos los que no han parado de aportar claves para entender el apagón en Catalunya y el resto de la Península. ¿Qué sabemos hasta ahora?
En declaraciones al Science Media Centre Espanya (SMCE), varios especialistas han analizado la situación. Uno de ellos es Manuel Alcázar Ortega, de la Universitat Politècnica de València (UPV), que ha recordado que "la red de transporte europea trabaja con el criterio de seguridad N-1, cosa que implica que el sistema puede seguir operando de forma segura aunque falle un elemento de la red". Es decir, que la causa no se deberá a un único error, "sino a una concatenación de acontecimientos que ha producido el apagón".
Energías renovables e inercia
Con respecto al descenso repentino de generación eléctrica, Alcázar ha explicado que, en un momento de demanda baja, la generación fotovoltaica superaba el 55% y había una reducida contribución de generadores que pudieran proporcionar inercia al sistema, cosa que ha hecho que el sistema no haya podido hacer frente a la variación de frecuencia y se haya desencadenado una desconexión en cadena de generadores que, al final, ha provocado el apagón. Hay que añadir que "la Península tiene una interconexión limitada con el resto del sistema eléctrico europeo a través de Francia, lo que la sitúa en una posición de debilidad ante otros sistemas eléctricos más interconectados". "Además, el hecho de que la producción fotovoltaica sea tan alta a determinadas horas hace que la inercia del sistema y la capacidad de gestión de energía reactiva para hacer frente a oscilaciones de frecuencia y tensión sea menor, lo que reduce la capacidad de reacción", ha agregado.
Miguel de Simón Martín, profesor de la Universidad de León, también ha intentado explicar los hechos al SMCE y ha insistido en el hecho de que ni los sistemas eólicos ni fotovoltaicos disponen de inercia. "Esta característica hace que, a más penetración renovable, menor sea la robustez de la red", ha dicho. Y ha añadido: "En consecuencia, con una baja capacidad de interconexión y otra participación de generación renovable basada en inversores, nuestra red es hoy más vulnerable y dispone de menos margen de reacción ante perturbaciones".
Interconexión con Europa
De Simón ha hecho referencia a la teoría de una perturbación en la red francesa causada por la desconexión repentina de una línea de muy alta tensión (400 kv), cosa que desequilibraría el sistema español —"más vulnerable por su menor interconexión y su menor nivel de generación síncrona"—. "A las 12 horas del día del apagón, el 73% de la demanda prevista iba a ser cubierta con energía solar fotovoltaica y solo un 3,3% con eólica, aumentado la exposición a fluctuaciones de tensión. La caída de tensión derivada podría haber provocado causado el desacoplamiento de plantas fotovoltaicas y eólicas, acelerando el colapso del sistema", ha concluido.
Por su parte, Álvaro de la Puente Gil (Universidad de León) se ha centrado en el hecho de que "la península Ibérica tiene una posición peculiar en el sistema eléctrico europeo porque está poco conectada con el resto del continente". "Sus interconexiones eléctricas son limitadas, de manera que, en la práctica, funciona casi como una isla energética. Eso la hace más vulnerable a perturbaciones internas: si ocurre un error importante dentro del sistema peninsular, no puede recibir bastante ayuda externa para estabilizarse. Además, en los últimos años, se ha incrementado mucho la presencia de energías renovables, como la solar y la eólica, que son variables y dependen del clima. Eso puede hacer que el sistema sea más difícil de controlar en tiempo real, si no se cuenta con bastante apoyo o almacenaje", ha explicado al SMCE.
Las múltiples causas
Finalmente, el ingeniero Marcial Gónzalez de Armas ha sido mucho claro: "Es una conjunción de incidentes en la red eléctrica. Una sucesión de factores en cascada o de forma conjunta que han provocado el colapso de tensiones en la red". El problema es que la poca capacidad de interconexión del sistema eléctrico español con el resto de Europa hace que aumente la vulnerabilidad ante una conjunción de acontecimientos como la del lunes, según ha comentado al SMCE.
Todavía no se conocen las causas del descenso súbito de generación eléctrica, pero lo que han dejado claro los expertos es que hacen falta nuevos protocolos y procedimientos de operación de red que incluyan a las renovables en la participación activa en su gestión, así como una mejor interconexión y almacenaje para evitar nuevos problemas en el futuro.