"No es abuso, es violación" ha sido el grito unitario en las multitudinarias manifestaciones que se han organizado este jueves por toda Catalunya y del estado español en contra de la condena sólo por abuso sexual al caso de La Manada. Miles de personas se han concentrado delante de los ayuntamientos para denunciar lo que consideran una ''justicia patriarcal'', ya que la resolución no tiene en cuenta ni la intimidación, ni la actuación grupal, ni la vulneración de la intimidad.

La convocatoria ha sido iniciada de manera espontánea y promovida por colectivos feministas a través de las redes sociales con el lema 'Digáis el qué digáis, no es un abuso es una violación en grupo'. Algunos sindicatos como CCOO, UGT o USTEC-STEs también se han sumado a la protesta que, en Barcelona, ha llenado la plaza Sant Jaume.

Delante de una fachada del consistorio que exhibe dos lazos, un amarillo y otro de color lila, muchos de los concentrados, la mayoría mujeres, ha vestido piezas de color violeta y pancartas con lemas como: "la injusticia nos ha violado a todas", "las mujeres estamos en guerra", "la ausencia de un 'no' es consentimiento", "ya es suficiente de violencias machistas".

Se han oído gritos de "Yo sí que te creo" y "Si tocan a una, nos tocan a todas". Entre consigna y consigna, también se ha hecho una cacerolada a la que muchos asistentes se han sumado haciendo sónar sus llaves. A continuación, la protesta ha salido de plaza Sant Jaume, en dirección al Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.

Con actitud pacífica pero reivindicativa, los manifestantes han bajado por la Vía Laietana, han pasado para|por Pla de Palau, por delante de la Estación de Francia, y han cogido el Paseo Picasso con la idea de subir por el paseo Lluís Companys hasta el Arc de Triomf, donde está la sede del TSJC.

Entre los concentrados, estaba la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y otros políticos como los diputados Ernest Maragall o Jenn Díaz. La alcaldesa ha criticado que "cinco hombres contra una mujer es una violación reiterada, es una violencia de primer nivel y es una cosa por la que ninguna mujer nunca tendría que pasar".

También se han visto pancartas con la fotografía de Ricardo González, el juez que ha emitido un voto particular para absolver a los autores, tildándole de "cómplice".

En la concentración de Tarragona, han asistido unas 500 personas que se han encontrado en la plaza de la Font, delante del Ayuntamiento, para rechazar la sentencia que se ha hecho pública este jueves. Durante el acto, varios colectivos feministas y civiles han leído manifiestos para condenar esta resolución que consideran injusta. "La injusticia nos ha atacado a todas; el patriarcado dicta y el juez obedece", ha denunciado el manifiesto.

10.000 personas en Bilbao

También ha habido grandes concentraciones ante los juzgados de las tres capitales vascas. Sólo en Bilbao se han reunido más de 10.000 personas bajo el lema "Nosotras somos mandada. Justizia patriarkalaren kontra (En contra de la justicia patriarcal)".

En Vitoria, los concentrados han empezado su recorrido en La Vírgen Blanca detrás de una pancarta en la que se podía leer "Esta sentencia es violencia" y, posteriormente, se han dirigido en manifestación espontánea hasta el Palacio de Justicia de la capital alavesa. En San Sebastián, la concentración ha tenido lugar ante los Juzgados, aunque también ha habido gente que lo ha hecho delante del Ayuntamiento coreando lemas como 'Nos tocan a una, nos tocan a todas',

En Madrid, colectivos feministas se han concentrado delante del ministerio de justicia convocados por el Movimiento Feminista de Madrid para protestar contra la sentencia "injusta" e "insuficiente" de la Audiencia de Navarra. Han protestado coreando cánticos como "si no estamos muertas no nos creen", "uno de ellos era picoleto", "sola, borracha quiero llegar a casa" o "justicia de mierda le estáis juzgando a ella".