La epidemia del coronavirus ha llegado inevitablemente a España y, día tras día, aumentan los casos de infectados en las diversas comunidades autónomas. Con los datos disponibles, unos científicos de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona y de la Universidad de Zaragoza han ideado un modelo matemático capaz de predecir el nivel de peligrosidad de contagio en cada municipio.
De esta manera, han creado un mapa interactivo que recoge todos los datos disponibles de los casos de coronavirus en el Estado. Junto con la información facilitada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los científicos han podido hacer una predicción de los movimientos de la gripe china por la geografía española a nivel municipal.
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Una aproximación al peligro
El objetivo es reflejar qué probabilidad tiene cada persona de contagiarse dependiendo del lugar en el que viva. Los investigadores trabajan con un modelo que permite hacer esta aproximación, de manera que cualquier persona puede consultar o comprobar cuál es el nivel de riesgo que tiene.
La actualización de datos, un problema
Una de las tareas más difíciles de los investigadores es determinar el municipio de cada persona nueva infectada, ya que no hay ninguna fuente pública de información que se pueda consultar. Por este motivo, el coordinador principal del proyecto pide ayuda a las administraciones para poder hacer más fácil la tarea y poder proveer un buen servicio a la ciudadanía.
Los científicos se enteran de los municipios de las víctimas principalmente por la prensa, pero mucho golpes se encuentran con la barrera de la ignorancia: algunos medios no aportan esta información. Por lo tanto, tener a la disposición del proyecto los datos de fuentes verídicas es indispensable, ya que eso permite seguir actualizando el mapa.
Información difícil de acceder
Según se ha podido saber, la información relativa al municipio de todos los pacientes depende de las consejerías de Salud de cada comunidad autónoma. Además, el Instituto Carlos III también sabe todos los datos, a pesar de que el protocolo regular a seguir es que se difundan una vez superada la crisis.
Por este motivo, los científicos encargados del mapa se encuentran en un callejón sin salida en muchas ocasiones, ya que la falta de información les impide hacer sus predicciones de manera fidedigna de acuerdo con las nuevas actualizaciones. Hay que destacar, además, que esta nueva invención ha cogido una cierta relevancia a nivel internacional, como es el caso de países como Portugal y los Estados Unidos. De hecho, el primer país podría estar interesado en exportar la idea.