Las mujeres siguen siendo las que asumen mayoritariamente la tarea de cuidado de los hijos. Así lo muestra un nuevo estudio de Oxfam Intermón que apunta que el 37% de las mujeres se ocupa de forma habitual de los hijos, mientras que la cifra cae hasta el 5,6% en el caso de los hombres. De la misma manera, un 39% de las mujeres asume siempre o casi siempre el cuidado cotidiano de personas mayores o que se encuentran en situación de dependencia, mientras que en el caso de los hombres la cifra desciende hasta el 24%.

Aunque los datos muestran una tendencia abrumadora de que las tareas de cuidados caen sobre las mujeres, solo el 23,5% de los hombres reconoce la desigualdad en el hogar como un "problema grave", mientras que el 36,7% de las mujeres sí que lo consideran un "problema grave". Según Oxfam, los hombres jóvenes (de entre 16 y 24 años) son los que menos perciben esta desigualdad.

El estudio realizado a través de una encuesta de percepciones y vivencias a 4.100 personas también expone que el 9,4% de las mujeres que han participado se dedica exclusivamente a las tareas domésticas y de cuidados no remuneradas, mientras que la cifra se sitúa en el 0,4% en el caso de los hombres. El informe también indica que dos de cada 10 mujeres declaran no haber podido continuar los estudios por responsabilidades en los cuidados, mientras que la proporción en los hombres es de uno de cada 10.

Impacto de la carga de cuidados en la vida

La investigación de Oxfam apunta que el 50,9% de las mujeres dicen estar satisfechas con su vida laboral, delante del 65,5% de los hombres. La cifra cae por debajo del 40% en el caso de las mujeres migrantes y de clases bajas. El bienestar de las mujeres se sitúa en el 67%, 10 puntos por debajo del de los hombres.

La carga de las tareas de cuidados no se expresa solo en el espacio laboral. El estudio también señala que las mujeres hacen menos ejercicio, tienen más déficit del sueño y disfrutan menos que los hombres del tiempo de ocio. En el caso de las mujeres racializadas, el 75,4% dice haber reducido actividades como ir al cine, comprar libros o pagar suscripciones a plataformas.

El informe subraya que "la brecha salarial y las desigualdades económicas limitan la estabilidad financiera de las mujeres, afectando a su capacidad de ahorro y acumulación de capital, lo cual, al mismo tiempo, puede ser un factor que influya en su peso en la propiedad". Según Oxfam Intermón, el 28,5% de las mujeres se declara propietaria de una hipoteca pagada, mientras en el caso de los hombres la cifra es del 39,1%.