El concejal de la CUP en Barcelona Josep Garganté ha cuestionado hoy que la designación de Enric Millo como delegado del Gobierno en Catalunya suponga una política diferente con respecto a los ayuntamientos que no celebren el Día de la Constitución porque, a su parecer, es un mero "cambio de caras".
En declaraciones a la prensa en un acto en apoyo al nacionalismo andaluz, Garganté ha asegurado que los concejales de su formación en Barcelona acudirán al ayuntamiento el próximo 6 de diciembre, cuando está prevista una reunión con ERC, y, en su caso concreto, por la tarde trabajará en su trabajo habitual de conductor de autobús de TMB. Garganté cree que la designación de Millo al frente de la Delegación del Gobierno en Catalunya, en sustitución de Llanos de Luna, es un simple "cambio de caras", porque a su parecer "las órdenes las reciben del Gobierno central y se dedican a acatarlas". Por este motivo, duda que la política de la Delegación del Gobierno el próximo 6 de diciembre sea diferente de la del pasado 12 de octubre, Día de la Hispanidad, cuando Llanos de Luna impugnó ante el juzgado la decisión del Ayuntamiento de Badalona (Barcelonès) de abrir al público.
Según el concejal de la CUP, el 6 de diciembre próximo "no hay nada que celebrar, y menos una Constitución monárquica que impide el derecho a la autodeterminación", por eso los cargos de su partido tienen previsto acudir al trabajo. En este sentido, ha afirmado que no le "sorprende" que el equipo de gobierno de Barcelona haya descartado abrir al público el Ayuntamiento el día de la Constitución, "todavía menos desde que está el PSC", que forma el equipo de gobierno al lado de Barcelona en Comú.
Los concejales de la CUP, al trabajo el 6-D
Todos los cargos electos de la CUP a los ayuntamientos, ya sea como miembros del equipo de gobierno o como concejales en la oposición, acudirán el próximo día 6, Día de la Constitución, a los consistorios al considerar que se trata de un día laborable y que "no reconocen la Constitución española". Según ha informado la CUP, la formación anticapitalista e independentista cuenta con representación a 146 ayuntamientos catalanes y 385 cargos electos.
Una treintena de grupos municipales de la CUP con atribuciones de gobierno continuarán con sus tareas habituales porque esta organización considera que el Día de la Constitución "no es una fecha que se haya celebrar y más cuando se ha empezado la construcción de una nueva República catalana". En consistorios gobernados por la CUP como Berga, Celrà, Viladamat o Sant Martí Sarroca está previsto que trabajen los equipos de gobierno municipales y se organicen otras tareas públicas abiertas a la población.
La organización independentista forma parte del equipo de gobierno de treinta ayuntamientos y en 18 ostenta la alcaldía. En otros consistorios, donde también gobierna a la CUP, se prevé que trabajen los cargos electos e invitarán a los trabajadores a acudir a su trabajo, como en Argentona, Capellades, Salt, Cardedeu o Sant Pere de Riudebitlles.
Otros municipios donde los cargos electos de la CUP irán a trabajar son Badalona, Barberà del Vallès, Cerdanyola del Vallès, Navàs, Artés, Bisbal d'Empordà y Ordis, entre otros. En los municipios en los cuales los concejales están en la oposición, estos acudirán a las dependencias municipales para desarrollar su actividad representativa habitual u otras propuestas.
La CUP ha hecho un llamamiento a la movilización de la población para participar en las actividades convocadas, la mayoría, en dependencias municipales.