Nuevo récord de calor histórico en Catalunya en plena ola de calor. Primero en las poblaciones de Darnius y Navata (las dos en el Alt Empordà) llegando a los 45,1º C, y horas más tarde Figueres, llegando a los 45,3 grados, han superado este martes el récord histórico de calor en Catalunya. Esta es una cifra nunca antes registrada en Catalunya, dónde el anterior récord de calor se registró en junio de 2019 en Alcarràs, con 43,8 grados. Los 45,3º de Figueres se han alcanzado después de una semana de calor intenso por todo el territorio catalán. En muchos lugares se pueden registrar cifras excepcionales, superando de largo los 40º C y llegando, como en el caso de Darnius, Navata y Figueres a superar los 45º. El Alt Empordà ha sido la comarca de Catalunya donde los termómetros se han elevado más en lo que va de día. Estos 45,3º C es la temperatura más alta medida por la Red de Estaciones Meteorológicas Automáticas #XEMA, con series de más de 30 años de datos, superando los 43,8 °C de Alcarràs del 29 de junio de 2019.
Amb una validació final encara per fer. Provisionalment 45,3 graus a Figueres, maxima de la xarxa AEMET a Catalunya. La tempetura ha pujat 5 graus desde 40 en una hora. I els ha baixat en 20 minuts degut al gir del vent de ponent a SSE. pic.twitter.com/zoGhvx3hCd
— AEMET_Cataluña (@AEMET_Cat) July 18, 2023
En Pantano de Darnius - Boadella (el Alto Empordà) se han alcanzado 45 ºC que es la temperatura más alta medida por la Red de Estaciones Meteorológicas Automáticas #XEMA, con series de más de 30 años de datos, superando los 43,8 °C de Alcarràs (29/06/2019).
— Meteocat (@meteocat) July 18, 2023
De hecho, son diversos los lugares donde el termómetro ha subido más allá de los 43,8 °C de Alcarràs en 2019. Es el caso de Anglès, en la comarca de la Selva, donde se ha llegado en los 44,8 °C y se ha superado la máxima del municipio de 43,2 °C registrada en junio del 2019. En Santa Coloma de Farners los termómetros también han marcado cifras de récord, llegando a los 43,6 °C, más de un grado por encima de los 42,3 °C que alcanzaron en julio del 2019. En Navata se ha roto el récord del 2015 y han subido hasta los 44,3 °C. En la capital del Pla de l'Estany, Banyoles, la temperatura ha marcado 44,2 °C y ha hecho añicos el récord anterior de 43 °C registrados en el 2015.
En la Bisbal d'Empordà, capital del Baix Empordà, también se han superado cifras de récord y han llegado a los 43,8 °C, superando el anterior máximo histórico del año 2003. En el Alt Empordà han caído ya varias máximas. Además de los de Navata y Darnius, en Torroella de Fluvià han visto cómo el termómetro se subía hasta los 43 °C, cuando el anterior récord, del 2015, fue de 41,1 °C. Finalmente, en el Vallès Oriental también se empiezan a pulverizar los récords: en Vilanova del Vallès han llegado a los 42,8 °C, cuando la anterior máxima registrada, en el 2015, fue de 40,6 °C.
El Govern pide "precaución extrema" delante de las altísimas temperaturas
La situación ha llevado al Govern a tomar precauciones extremas, cerrando el acceso a seis espacios naturales de alto riesgo de incendios y suspendiendo las autorizaciones para tareas que puedan suponer un peligro para los trabajadores. Además, se ha incrementado la vigilancia por todo el país a causa de la llegada de la masa de aire cálido y seco que, junto con la elevada insolación de esta época del año, favorecerá registros inusualmente altos, como ya ha pasado por todo el territorio. Se prevé que el pico máximo de calor en Catalunya sea este martes, con temperaturas que oscilarán en torno a los 42 °C en el interior del país y localmente en torno a los 44 °C en algunas comarcas de Girona, temperaturas que en muchos casos ya se han alcanzado.
El fenómeno ha impactado varias regiones, incluyendo el Pla de Lleida, la cuenca de Tremp, la Catalunya Central y grande parte de las comarcas de Girona, donde se han registrado temperaturas de más de 40 °C en multitud de poblaciones. Ciudades como Lleida, Balaguer, Mollerussa, les Borges Blanques, Manresa, Besalú, Banyoles y Figueres estaban entre las que podían alcanzar o superar los 43 °C, como finalmente ha sucedido en algunos casos.
Esta ola de calor sin precedentes ha llevado a la población a tomar precauciones adicionales y a estar alerta ante los riesgos asociados con las altas temperaturas y el peligro de incendios forestales. Se prevé que las autoridades sigan vigilando de cerca la situación y tomen las medidas necesarias para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.