El Ayuntamiento de Badalona ha ordenado desalojar otro bloque de veinte pisos, el sexto desde el hundimiento en la vecina calle Canigó que dejó tres víctimas mortales el pasado 6 de febrero. Este nuevo edificio desalojado es el número 118, en la calle Ausiàs Marc y adyacente a los edificios donde ya se actuó la semana pasada: se trata siempre de la misma isla de casas —una isla de tipo casi triangular entre las calles Canigó, Ausiàs Marc y Llefià— y, en todos los casos, por la aparición de grietas graves que comprometen la estructura del edificio y, por lo tanto, la seguridad de sus habitantes. Este último bloque que ahora se ha ordenado desalojar se inspeccionó ayer martes.
El pasado viernes 1 de marzo se ordenó el desalojo del bloque número 116, situado en la parte posterior de la calle Canigó, después de detectar grietas. Este fue el primer edificio desalojado que no estaba en la misma calle Canigó, sino ubicado en la parte posterior de la isla de casas. En esta isla hay más de 400 pisos que el Ayuntamiento y la Generalitat acordaron inspeccionar técnicamente para detectar posibles daños estructurales, ya que se trata de edificios construidos por un mismo promotor entre los años 1954 y 1960. Justo esta semana, las dos administraciones se reunieron y se comprometieron a firmar un convenio para financiar estas revisiones.
Fruto de estas visitas técnicas, que empezaron la semana pasada, se han detectado nuevas deficiencias estructurales. En la mayoría de casos se ha optado por los sucesivos desalojos, si bien en el número 3 de la calle Canigó se decidió apuntalar algunos pisos sin necesidad de que los vecinos abandonaran sus casas. También ha habido casos en que las grietas se han considerado superficiales. En el caso de las fincas desalojadas, también se han instalado puntales para garantizar la seguridad y para facilitar entradas programadas para que los vecinos puedan recoger algunas pertenencias. Según el Govern, la previsión es terminar las revisiones durante esta primera quincena de marzo.
La AMB destina un millón de euros para los afectados
Por su parte, la Junta de Gobierno del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) aprobó ayer martes una partida de un millón de euros para ayudar a los vecinos de Badalona y Santa Coloma que residen en pisos con deficiencias estructurales. En concreto, el ente supramunicipal ha concedido 600.000 euros al Ayuntamiento de Badalona y 400.000 en el de Santa Coloma, ya que serán los consistorios los que canalizarán estas ayudas entre los afectados. "El objetivo de las subvenciones es cubrir los gastos de atención a las personas en situación de emergencia social producida por el hundimiento o el desalojo de edificios residenciales en mal estado", detalla la AMB en un comunicado.
Albiol promete no multar obras ilegales que hayan podido afectar a las estructuras
El alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol, afirmó el viernes pasado por la tarde que el Ayuntamiento no multará las obras ilegales que se hayan podido hacer en los bloques desalojados de la calle Canigó y adyacentes, como derribos de paredes maestras para ampliar espacios o construcciones en los áticos que provoquen sobrepesos en la estructura. Sí que advirtió que si los informes que se están haciendo sobre los pisos afectados indican que hace falta rehacer paredes o derribar construcciones no permitidas, el consistorio velará para que los propietarios cumplan el dictamen. "Nuestra voluntad clara es no castigar más a estas personas que ya han sido lo suficiente castigadas. Estamos para ayudar, no para empezar a perseguir obras sin permisos para poner multas. Pero si un informe señala que en un terrado se ha hecho una habitación y hay sobrepeso, se tiene que sacar", afirmó el alcalde.