La Sagrada Familia y las calles de su alrededor han sido desalojadas y acordonadas por los Mossos D'Esquadra este martes por la noche por lo que ha resultado una falsa alarma. La policía catalana ha informado a través de Twitter de que estas medidas se han tomado en el marco del operativo antiterrorista que están llevando a cabo en Barcelona y alrededores esta tarde. Una furgoneta sospechosa que circulaba cerca del templo ha hecho saltar las alarmas, aunque finalmente el incidente ha acabado en nada.
Al lugar de los hechos, se han desplazado varias patrullas de los Mossos D'Esquadra, Guardia Urbana, Bomberos y dotaciones del SEM. Más tarde, se han movilizado los TEDAX, especialistas en artefactos explosivos, que se han añadido al dispositivo.
Concretamente, se han cortado las calles Provença, Rosselló y Sardenya, para que los agentes puedan hacer comprobaciones. Los vecinos han sido confinados en sus casas. Las dos líneas de metro que pasan por esta zona, la L-2 y la L-5, no se detenían en esta estación. A partir de ahora, se está trabajando para reestablecer la normalidad y el tráfico.