Desconvocada la huelga de transportistas españoles en apoyo a los agricultores, que empezó este sábado. En un breve comunicado, la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional-Internacional ha informado de que pronto harán las "declaraciones y explicaciones correspondientes" después de haber desconvocado el paro este lunes. Recordemos que la plataforma ya paralizó parte de la actividad económica del Estado en marzo del 2022 y ahora ha aprovechado las tensiones para sumarse a las protestas del campo promovidas por la Plataforma 6-F. La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) había aprobado no secundar ningún paro indefinido del sector en solidaridad a las protestas agrícolas.
"Desde este momento queda convocada de manera oficial un paro nacional indefinido", anunció el sábado el líder de la plataforma, Manuel Hernández, después de una votación a mano alzada en qué participaron decenas de personas que se concentraron en la explanada del estadio Metropolitano (Madrid) para unirse a las protestas agrícolas. La ganadera y exmilitante de Vox Lola Guzmán, portavoz de la Plataforma 6-F, aseguró que la reunión no era "ningún acto político". "No nos convoca a ningún partido político, no queremos a ningún sindicato ni agrario ni político ni nada. Eso es el pueblo contra los gobernantes, contra los políticos", afirmó, exigiendo que los ministros de Agricultura y de Transporte se reunieran para responder sus reclamos. Hernández ya había acusado al Gobierno "de verterlos al conflicto para no sentarse a escuchar".
Una huelga sin seguimiento en Catalunya
La concentración en el exterior del estadio Metropolitano acabó con altercados. Una vez los transportistas y los agricultores habían ratificado la decisión de convocar un paro indefinido, los asistentes intentaron saltarse unas vallas con la intención de cortar la M-40 y la policía española cargó contra la concentración, provocando a varios heridos. Además, la movilización en Madrid pinchó: se había hecho un llamamiento a colapsar la ciudad como ya se había hecho en Barcelona, pero este escenario no se produjo. Tampoco hubo protestas delante la sede del PSOE, en Ferraz, donde se había instalado un macrodispositivo.
En Catalunya, la huelga de los transportistas tampoco tuvo éxito. La asociación de autónomos-pymes transportistas catalanes (AGTC) no secundaron el paro, ya que "no se dan las circunstancias para convocar en este momento una medida de presión límite". Así, pronosticaron un "seguimiento insignificante a Catalunya, dada la nula implementación territorial de la plataforma convocante". El AGTC insistió en que el sector no se encuentra en una "situación crítica" y aseguró no entender "a qué intereses reales responde la convocatoria, ya que la problemática y necesidades del sector agrario son muy específicas y diferentes de las del sector del transporte". En esta línea, las medidas aprobadas en los últimos dos años han permitido "aliviar el impacto por la subida de combustibles".