La inauguración del tranvía de la Diagonal, entre la plaza de Glòries y la calle Verdaguer, que se tenía que celebrar este sábado, quedó suspendida a causa de la huelga convocada por los trabajadores del Trambaix y el Trambesòs. Esta mañana, sin embargo, una vez se cancelaron el acto, al que tenía que asistir el presidente de la Generalitat Salvador Illa y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, los sindicatos Comisiones Obreras (CC.OO.) y UGT habían anunciado que la huelga había quedado desconvocada, pero posteriormente han dado marcha atrás y han aclarado que solo desconvocaban los actos de protesta. La jornada de huelga, pues, se mantiene para este sábado y la puesta en servicio del nuevo tramo se aplaza a este domingo, desde el inicio habitual del servicio a las 5 de la mañana.

Problemáticas laborales y de seguridad

Los comités de empresa de los dos recorridos del tranvía en Barcelona, ​​el Trambaix y el Trambesòs, habían convocado esta huelga coincidiendo con la inauguración del nuevo tramo de la Diagonal previsto para el sábado. Las movilizaciones se habían convocado en protesta por diversas problemáticas laborales y de seguridad. En la nota que hicieron pública los sindicatos para justificar la huelga aseguraban que la jornada de huelga quiere poner sobre la mesa los problemas que “afectan tanto a la calidad del servicio como a la seguridad de personas trabajadoras y usuarios”. "Desde el inicio del servicio de tranvía en Barcelona en 2004, el número de usuarios se ha multiplicado por seis, pero este aumento no ha venido acompañado de una ampliación proporcional en los recursos", apuntaban, para añadir que actualmente , “se sigue operando con el mismo número de tranvías y conductores, menos inspectores, y sin ajustes en los tiempos comerciales, incluyendo los tiempos en parada por el acceso de los pasajeros”.

Los comités de empresa alertan de una sobrecarga de trabajo que afecta a la salud de los trabajadores con "niveles inaceptables de estrés" y un incremento de las bajas por ansiedad. Además, denuncian que el aforo de los tranvías ha superado en muchas ocasiones la capacidad legal de los vehículos y que esto compromete la seguridad y confort de los pasajeros. También observan un déficit de vigilantes de seguridad.

La cancelación de los actos inaugurales con los representantes institucionales dejó sin visibilidad la huelga convocada, que pretendía aprovechar la presencia de las autoridades para amplificar la cobertura mediática de las protestas. Además, el aplazamiento de la puesta en servicio el tramo que quedaba inaugurado este sábado, para mañana domingo, hace que la huelga solo afecte al Trambaix y Trambesòs pero no al nuevo tramo de la Diagonal entre la plaza de las Glòries y la calle Verdaguer.

Servicios mínimos del 33%

El Departamento de Empresa y Trabajo decretó servicios mínimos del 33%, por lo que pasarán uno de cada tres tranvías. No se ha fijado un porcentaje más alto en horas punta porque, al no ser día laborable, consideran que la movilidad se distribuye durante todo el día y no se concentra en unas horas determinadas.