Un grupo de paleontólogos ha descubierto el yacimiento de dinosaurios más moderno de Europa en un punto situado muy cerca de la población de Sant Romà d'Abella, en el Pallars Jussà. En el yacimiento, conocido como el del Molí del Baró, se han encontrado una gran diversidad de restos de dinosaurios, numerosos restos óseos de cocodrilos así como conchas de tornillo terrestre.

Los restos permitirán a los investigadores dibujar el paisaje que había en la Cuenca de Tremp hace 66 millones de años, justo antes de la extinción de los dinosaurios. La mayoría son de hadrosauros de diferentes tamaños, pero también se han recuperado dientes de dinosaurios carnívoros y fragmentos de conchas de huevos de titanosauros.

Imágenes: ACN

Àngel Galobart, paleontólogo del Instituto Catalán de Paleontología y del Museo de Isona, ha explicado que las más abundantes corresponden a diferentes especias de vegetales, entre las cuales destacan las hojas de la palmera Sabalites. Aparte de hojas, se han encontrado innumerables fragmentos de troncos y entonces. El yacimiento está formado por areniscas y arcillas de color gris depositadas en un ambiente fluvial, seguramente en el fondo de una pequeña acumulación de agua en un meandro abandonado o a una zona muy próxima a un río, ha explicado Galobart.

El paleontólogo ha explicado que los dinosaurios vivieron 150 millones de años y los muchos yacimientos que se han excavado han dejado imágenes de periodos muy diferentes. Asimismo, ha insistido en que tanto al límite de la extinción de los dinosaurios "no hay ninguno más en Europa". Por lo tanto, los científicos, con estos restos, podrán dibujar el último paisaje y la forma de vida de los últimos dinosaurios.