El narcopiso de la calle Agustí Duran i Sanpere —donde había la sede de Edicions 62— ya es historia. Como mínimo por un tiempo. Una operación policial conjunta de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana han permitido desmantelar uno de los mayores centros de droga, después de que tapiaran el de la calle Roig número 22. De hecho, los vecinos denuncian que el narcopiso se puso en marcha pocas semanas después de desmantelar el anterior.
La intervención empezó sobre las seis y media de la tarde, cuando había una docena de personas consumiendo droga, identificadas por la policía. Durante la operación se detuvieron dos personas y se decomisaron varias dosis de cocaína, heroína, una balanza de precisión y dinero.
Según fuentes próximas a la investigación, en el interior habría un gran número de jeringas, hecho que demostraría lo que llevan meses denunciando los vecinos: que el local actuaba de narcopiso, o sea, de lugar de venta y punción de droga. El local está situado al lado de un instituto y de una escuela del barrio.
Esta mañana han empezado los trabajos de tapiado del edificio, y en pocas horas se colocará la llamada puerta antiokupa.
El temor de los vecinos es saber dónde se colocará ahora el negocio desmantelado, y es que, a pesar de los esfuerzos policiales, aseguran que "cuando se cierra un narcopiso se obre otro".
Según el Ayuntamiento de Barcelona, este año la policia ha actuado contra 53 pisos o locales donde se vendía o consumía droga en Ciutat Vella, y se han detenido 70 personas relacionadas con esta actividad.