La lucha contra los teléfonos móviles en las escuelas e institutos es una de las claves de este curso escolar en Catalunya. El Ayuntamiento de Manresa ha impulsado una iniciativa para prevenir un "uso abusivo del móvil" regalando despertadores a los alumnos de 1.º de la ESO del Instituto-Escuela Manresa. El objetivo es que los alumnos se despierten utilizando un tradicional objeto como un despertador y uno con el móvil, ya que es un hábito mucho más saludable que quieren fomentar. Según la concejala de Infancia y Juventud, Isabel Sánchez, "el reto es hacer un buen uso de la tecnología" porque puede acabar siendo un problema de salud pública. Se trata de la primera acción de una campaña para promover el bienestar y la salud de los jóvenes y con el apoyo de la Fundación Althaia y el Adolescència Lliure de Mòbils del Bages. Aparte, el consistorio también repartirá manteles industriales de papel en los restaurantes para que los niños puedan dibujar y sea una alternativa al uso de pantallas, entre otras acciones.
En total, el Ayuntamiento de Manresa repartirá un millar de despertadores a todos los alumnos de 1.º de ESO de Manresa. El concejal de Educació, Pol Huguet, ha afirmado que "empezamos con los despertadores para que no sea una excusa para despertarse las mañanas con el móvil". El uso del móvil es una cuestión que preocupa a las familias y que genera conflicto en su día a día, especialmente a las noches y los fines de semana. Ante este escenario, el consistorio ha puesto en marcha la campaña '¿Eres adicto a la pantalla?', para fomentar las buenas prácticas y sumar alianzas con otras entidades.
Uso abusivo de las pantallas
La campaña está impulsada junto con la Fundación Althaia, que alerta de las consecuencias de un uso abusivo de las pantallas. La responsable de la unidad de adicciones comportamentales de la institución, Dominica Díez, ha asegurado que "cada vez vemos más efectos de salud físicos y emocionales: problemas visuales de miopía, obesidad, dolor de cabeza y problemas de atención". Los casos más extremos son aquellos jóvenes que no salen de casa y que Internet es el único contacto con el exterior. Los desengaños con relaciones sociales, las presiones en algunos ámbitos o algunos videojuegos o aplicaciones en línea pueden estar detrás de estos comportamientos.
Sin embargo, Díez ha puesto el foco también a las familias y ha puesto de ejemplo a aquellos padres que "no toleran bien el llanto de sus niños" y que les dan el móvil como si fuera un "chupete digital". Desde su punto de vista, la clave está en "poner límites", como se hace en otros ámbitos como la alimentación. "Cuando el niño sabe lo que puede hacer y lo que no, ya sale la creatividad y hay otras actividades", asegura. Por eso, uno de los grandes consejos que han aportado es programar actividades libres de pantallas o con pantallas en familia porque "también se puede hacer un buen uso", dice. Dar un buen ejemplo a los hijos, dice, es también un aspecto clave.
El papel de las familias
El Grup Adolescència Lliure de Mòbils del Bages dan apoyo a la iniciativa. Una de sus portavoces, Gemma Franquesa, ha explicado que es una campaña "muy importante" porque ayudará a las familias a "no banalizar el uso del móvil en edades tempranas" y a "tener menos presión social" por la tendencia cada vez más extendida de empezar la ESO con un móvil. Según Franqueza, gracias a iniciativas como esta sienten que "no están solos" porque ahora también hay educadores, concejales y la Fundación Althaia que "van en la misma línea".
Entre los alumnos que han recibido un despertador está la Gina, alumna de 1.º de ESO, ha detallado en declaraciones en la ACN que sus padres han decidido que no tendrá móvil hasta los 16 años y que es consciente que algunas amigas tendrán antes. En este sentido, ha reconocido que eso ha provocado discusiones en casa, pero se ha mostrado comprensiva: "Más de una vez he dicho que lo quería, más que lo necesitaba, porque cuando le das vueltas ves que se puede vivir sin una pantalla delante". Otros alumnos como el Arán sí que tiene móvil, pero hay un uso responsable. "Dedico unas 3 horas diarias", ha explicado, y ha indicado que entiende que "estar enganchado al móvil, es negativo y que, si está poco tiempo, es mejor para tus ojos y la salud". En su caso, por ejemplo, lo utiliza para hablar con los amigos, quedar y también pedir deberes.
La campaña del Ayuntamiento se completará con otras acciones relacionadas, como talleres para los alumnos de segundo ciclo de ESO sobre el uso de las pantallas y las redes sociales, o la exposición '¿Controlas?' que reflexiona sobre las adicciones en las drogas y en las pantallas.