El Cuerpo Nacional de Policía ha detenido al organizador de la fiesta de Torremolinos que no permitía la entrada a "maricones", tal como ha avanzado este viernes la SER Málaga y Málaga Hoy. El espacio 'Casa Fátima Ino', que se autodefinía como club privado marroquí de lujo, tenía previsto abrir este 18 de enero y se promocionaba en las redes sociales con unas desafortunadas normas de acceso al local que hicieron estallar la polémica el viernes pasado: "No peleas, no drogas, no gorras, no chanclas, no maricones".
El mensaje homófobo podría salir caro al promotor del acontecimiento. La Fiscalía de Málaga inició pocos días de estallar el escándalo diligencias para investigar la fiesta de Torremolinos y dirimir si los organizadores habían incurrido en un delito al negar un servicio o actividad empresarial a un colectivo, en este caso en razón de orientación sexual, tal como dicta el artículo 512 del Código Penal. Los hechos los había denunciado la alcaldesa del municipio, Margarita del Cid (PP), que dio orden a los servicios jurídicos del ayuntamiento de estudiar acciones legales. El Ministerio Público ha recibido también denuncias de la asociación Facua y de numerosas entidades por los derechos LGBTQI+.
Fue la misma alcaldesa de Torremolinos la que hizo la alerta que puso el acontecimiento homófobo en el centro de la polémica, al denunciarlo públicamente y haciéndose eco de la publicación a las redes sociales del club privado, que se ubica en la calle Cruz del municipio. La dirección del espacio prohibía la entrada a los "maricones" explícitamente y añadía que se reservan "el derecho de acceso". El municipio malagueño es, además, un pueblo del cual es muy conocida su celebración del Orgullo LGTBI y que tiene una importante comunidad del colectivo.
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, también salió a pronunciarse sobre los hechos y lo tildó de "intolerable" y de "ataque directo a la igualdad". "Nuestra condena absoluta en este tipo de discriminaciones que no tienen cabida de ningún tipo en nuestra normativa y en nuestra Constitución", aseguró Redondo el viernes pasado en declaraciones a la prensa. Redondo ha afianzado también que desde el punto de vista jurídico, democrático y desde los derechos "es nula esta prohibición", por lo que ha reprobado completamente "este tipo de actitudes y este tipo de decisiones que atentan contra la igualdad y que son claramente discriminatorias".
Una reserva del derecho de admisión ilegal
España, de hecho, contempla en su legislación la prohibición de discriminar por motivo de orientación sexual. La ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI que impulsó el Ministerio de Igualdad a cargo de Irene Montero (Podemos) apunta expresamente en el artículo 25 "la correcta aplicación del derecho de admisión" para evitar que discrimine "en razón de orientación sexual, identidad sexual, expresión de género o características sexuales" en el sector del ocio. En caso de incumplimiento, se puede contravenir un derecho fundamental recogido en la Constitución española en el artículo 14, como es la prohibición de discriminar por sexo, orientación sexual y nacionalidad.