Importante golpe de la Policía Nacional española y de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria contra una red prorrusa que se dedicaba, desde Cataluña, a la venta de productos a la administración de Vladímir Putin eludiendo las sanciones impuestas por la Unión Europea desde el estallido de la ocupación rusa en Ucrania. La operación, que arrancó en 2022, ha permitido confiscar 13.000 kilos de productos químicos en un contenedor en el puerto de Barcelona y detener a personas en Sant Feliu de Guíxols, en la comarca del Baix Empordà, y en Cerdanyola del Vallès y Santa Perpètua de Mogoda, en el Vallès. Las detenciones se realizaron el pasado 8 de octubre y los detenidos ya están en libertad con cargos.

Se les acusa de contrabando y de saltarse las sanciones impuestas a Rusia y vender, de manera ilegal, los productos a Rusia. Entre los productos químicos, a falta de una investigación más a fondo, se encuentran precursores de armas químicas. El caso lo ha dirigido la Audiencia Nacional española y la investigación contra estos aliados de Putin aún no se ha dado por cerrada, y los agentes de Información de la Policía Nacional no descartan que puedan realizarse más detenciones.

Empresas pantalla para enviar productos a Rusia

La investigación, que se inició en 2022 a raíz del conflicto en Ucrania, ha servido para destapar una empresa gestionada por ciudadanos de origen ruso instalados en Cataluña, que habían creado un complejo sistema de triangulación comercial para enviar ilegalmente estos productos. La empresa española contaba con una filial en Moscú, pero utilizaba varias empresas pantalla en países como Armenia y Kirguistán para ocultar el destino final de las mercancías, que era la Federación Rusa.

Los productos químicos confiscados, tecnología de doble uso, pueden ser utilizados como precursores de armas químicas o agentes nerviosos y están prohibidos por las sanciones internacionales a raíz de la invasión rusa en Ucrania. Tras seguir la pista de las empresas, al detectar movimientos extraños y aproximaciones al gobierno de Putin, decidieron pasar a una nueva fase, que sirvió para explotar el caso, y confiscar el material, que no era el primero que salía desde Cataluña hacia Rusia, haciendo creer que iba a Armenia y Kirguistán. Los detenidos ya están en libertad con cargos, según ha podido saber ElNacional.cat.

De Barcelona al Líbano para atacar Israel

No es la primera vez que desde Barcelona, desde la capital de Cataluña, empresas fantasma y empresas pantalla, trabajan de manera ilegal para enviar productos a organizaciones terroristas. Hace pocas semanas la Guardia Civil detuvo a tres personas relacionadas con el envío al Líbano, para Hezbolá, de productos que después se utilizaban, también en doble uso, para fabricar drones para atacar civiles en Israel, tal como adelantó ElNacional.cat.