Golpe contra el terrorismo pakistaní en Cataluña. Los Mossos d'Esquadra, junto con la Policía Nacional y la Polizia di Stato italiana, han desarticulado una organización terrorista por su presunta participación en delitos de enaltecimiento, apología, financiación y adoctrinamiento del terrorismo, y por haber realizado acciones para marcar objetivos terroristas en nuestro país y en toda Europa. Se han detenido once personas, la mayoría en Barcelona y en el área metropolitana, y una en Italia, en Piacenza. Se han realizado ocho entradas y registros con detenidos en Barcelona, Montcada i Reixac, Sant Adrià, Badalona, Sabadell y Santa Coloma de Gramenet.

Objetivos en Europa

La investigación ha permitido detectar la presencia en España e Italia de un grupo perfectamente jerarquizado y estructurado que impartía, a través de canales cifrados, consignas que fomentaban el asesinato y la decapitación de las personas que iban en contra de su doctrina islamista —que no gihadista. Además, en sus publicaciones enaltecían a terroristas que habían cometido atentados contra personas por supuesta blasfemia en Europa y Pakistán. En algunos de los investigados se ha constatado que ya habían comenzado a identificar personas en Europa como posibles objetivos. Esta operación conjunta es la tercera fase de una investigación ya materializada por la Policía Nacional en la que se detuvo a cinco personas en 2022 y a 14 en 2023. El detenido en Piacenza trabajaba allí desde hacía años y fue el pasado día 3 de marzo cuando, tras recibir una orden de detención europea, fue arrestado y entregado al juez de guardia de allí, donde negó los hechos y negó ser extraditado a Madrid, donde está reclamado por la Audiencia Nacional. Se trata de un hombre de nacionalidad pakistaní, como el resto de detenidos, de unos 30 años.

 

Durante la investigación se ha detectado la existencia de grupos de mensajería instantánea donde se expandía la doctrina de esta organización. Uno de ellos estaba dinamizado por una de las detenidas y compuesto totalmente por mujeres, donde se promovía no solo el adoctrinamiento, sino que también se perseguía la identificación de posibles objetivos para futuras acciones en territorio europeo. No consta, en esta investigación, que los ahora detenidos hayan participado ya en alguna acción violenta en territorio catalán o español. Los investigadores han acreditado que los detenidos pertenecen a una presunta organización terrorista de origen pakistaní, cuyo financiamiento incluye aportaciones periódicas de los propios integrantes de la organización.

Cuatro, a prisión

Por parte de los Mossos d'Esquadra participaron cerca de 150 efectivos. Además de los integrantes de la Comisaría General de Información, formaron parte del operativo: equipos del Grupo Especial de Intervención (GEI), Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), especialistas en desactivación de explosivos, Unidad Canina, Policía Científica y Seguridad Ciudadana.

Después de ser detenidos, siete fueron entregados a la Audiencia Nacional y al juez Antonio Piña, quien ordenó prisión para cuatro y libertad con cargos para tres de ellos, todos por los delitos de terrorismo, financiación del terrorismo, capacitación y autoformación. Los que han quedado en libertad deberán comparecer ante el juez cuando sean requeridos y no pueden salir del Estado.