Operación de los Mossos d'Esquadra este jueves, 2 de noviembre, para detener a seis de los ultras del RCD Espanyol de Barcelona que saltaron al terreno de juego el pasado 14 de mayo después del partido que los locales, que estaban ya virtualmente en segunda división, jugaron contra el FC Barcelona, que, después de aquella victoria con el eterno rival, se coronaba campeón de la Liga. Los aficionados más radicales y violentos del Espanyol, la mayoría tapados con pasamontañas, saltaron al campo para impedir la celebración de los jugadores del Barça y provocaron daños en las instalaciones deportivas y en una cámara de televisión que estaba grabando los incidentes violentos.
Agentes de la Comisaría General de Información han tirado hoy un operativo policial que ha permitido la detención de seis personas, seis hombres, los seis de nacionalidad española, de entre 23 y 46 años. El asalto al terreno de juego provocó daños por valor de 32.110,74 euros, según las denuncias que presentaron desde el mismo club y también la empresa de la cámara de televisión. Según el atestado de los Mossos d'Esquadra, un centenar de personas saltaron al campo, pero fueron estos seis detenidos hoy los que, desde la grada de animación, alentaron y orquestaron el salto.
Los jugadores del FC Barcelona escaparon de la turba violenta
Los jugadores del Barça y el equipo técnico blaugrana, con el entrenador Xavi Hernández al frente, tuvieron que interrumpir la celebración y corrieron en dirección al túnel de vestuarios con el fin de poder esquivar la turba de aficionados radicales. Para evitar la agresión de los jugadores del FC Barcelona, los vigilantes de seguridad privada y también efectivos de la Brigada Móvil (Brimo) de los Mossos desplegaron varias líneas de seguridad. Muchos de los que saltaron se encararon a los vigilantes de seguridad, con el lanzamiento de objetos.
Cuando se pudo recuperar la normalidad y los alborotadores volvieron a la gradería, se inició la investigación policial, que ya permitió identificar a varias personas, algunas de ellas vinculadas al Partido Popular, que se presentaron voluntariamente en la comisaría de los Mossos d'Esquadra. Hoy, sin embargo, se ha cerrado la investigación que se inició entonces con la detención de seis personas en Sant Boi de Llobregat, en Sant Joan Despí, en Lliçà de Vall, Barcelona y en Sant Cugat del Vallès. Los seis hombres arrestados, que están acusados de daños, no tienen antecedentes por delitos de este tipo relacionados con la violencia con el deporte y no forman parte de Brigadas Blanquiazules, el grupúsculo de extrema derecha vinculado al Espanyol.
Más de 50 denunciados por la invasión del mes de mayo
Además de los detenidos, los Mossos d'Esquadra también han identificado un grupo numeroso de personas, una cincuentena, de los cien que saltaron al campo, y que no tuvieron conductas presuntamente delictivas, pero que han sido denunciados administrativamente por infracciones a la Ley 19/2007, de 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.