Un horno de Maó ha pedido disculpas por un episodio de catalanofobia. "Viva nuestra cultura", han expresado los propietarios, en un breve comunicado recogido por dBalears. Los hechos se conocieron la semana pasada, cuando un usuario de Twitter denunció "discriminación lingüística" a Es Llonguet Forn Artesà de la capital menorquina. Según relató, una cliente comentó que era una "lástima" que no la pudieran atender en catalán en un lugar donde todo está escrito en catalán. "Estamos en España y yo hablo en lo que me da la gana", respondió la dependienta.
#DiscriminacióLingüística a "Se Panecillo Forn Artesano" de Mahón. Una cliente comenta que es una llastima que un lugar|sitio donde|dónde todo escrito en catalán, no la pueden atender en catalán. Respuesta de la dependienta "Estamos en España y yo hablo en lo que me da el hambre" y deja de atenderla.
— Joan Fuster (@JoanFusterPV) Augusto 4, 2024
Si la respuesta no fuera suficiente, la dependienta dejó de atenderla. La cliente cedió y cambió al castellano, sin éxito: fue ignorada. Entonces, pidió la hoja de reclamaciones y le dijeron que no tenían. "El resto de dependientas hacen como si nada, nadie se disculpa ni nada", concluye el usuario.
La cliente había cambiado al castellano y la dependienta la ignora. En eso la cliente pide hoja de reclamaciones. Dicen que no tienen!? El resto de dependientas hacen como si nada, nadie se disculpa ni nada. @dbalears @PlataformaPV https://t.co/1T7w5WEqm2
— Joan Fuster (@JoanFusterPV) Augusto 4, 2024
Una semana después de los hechos, los propietarios han difundido un breve comunicado para pedir disculpas por este episodio de catalanofobia. "Queridos y queridas, en nombre de todo el equipo de Es Llonguet nos queremos disculpar si alguna persona se ha sentido mal atendida, como consecuencia de los hechos," empieza el texto.
Los propietarios relatan que hace muchos años que velan por el oficio de hacer pan, "para compartir la repostería de casa nuestra con isleños y visitantes y de ser inclusivos en todos los sentidos", con la gente que quiere probar aquello que hacen y con la gente que tiene ganas de formar parte de la comunidad. "De nuevo, nos queremos disculpar en nombre de todo el equipo, por este atentado en contra desde nuestros propios principios y comunicar que ya nos hemos hecho cargo de gestionar internamente esta situación", añaden. Además, aclaran que sí que había hojas de reclamación y que "la encargada era nueva, llevaba dos días de incorporación y estaba en formación". "Nos ponemos a disposición de la persona afectada, en este caso, para disculparnos personalmente y gestionar cualquier necesidad que derive al respecto", dicen, antes de concluir: "Viva nuestra cultura y viva el buen trato hacia la gente".