El Gran Premio de F1 que se disputa en el Circuit de Catalunya, en Montmeló, es uno de los orgullos de país y uno de los acontecimientos que ponen Catalunya en el mapa internacional. La F1, y todo lo que mueve, es un generador de beneficios de complicado cálculo por las ciudades del Vallès Oriental y también por Barcelona. Un polo de atracción de personalidades VIP de todo el mundo y aficionados al motosport que también vienen de todos los rincones del Estado y del extranjero. El Circuit de Catalunya, como una de las joyas de la corona de nuestro país, los días de F1, como también cuando se disputan los grandes premios de motos, necesita que las competiciones sean 100% seguras y con un dispositivo de seguridad, como los grandes premios, de primer nivel. Son los Mossos d'Esquadra, la policía integral de Catalunya, quien asume la seguridad de estas competiciones.
Un reto para la región policial Metropolitana Norte del comisario Sergi Pla y las comisarías locales de la zona que tienen que desplegar, durante los tres días que dura el Gran Premio de F1, un dispositivo de primer orden, el mayor que hace la policía catalana, con más de 500 agentes movilizados y con varios puntos críticos. ElNacional.cat pudo acompañar el comisario Pla y la comisaría Montserrat Estruch, la hasta este viernes número 2 de la región, durante el dispositivo del domingo pasado durante la celebración de esta prueba. El resumen en imágenes, en este vídeo.
Los Mossos d'Esquadra despliegan medio millar de agentes durante los tres días que dura este dispositivo que ha explicado el comisario Sergi Pla a las cámaras de ElNacional.cat. Uno de los pesos nucleares de este operativo es la movilidad. Unos 20.000 vehículos quieren entrar y salir del Circuit de Catalunya los días de competición y las carreteras que dan acceso, la C-17 y la autopista AP-7, tienen la capacidad que tienen. Los Mossos despliegan, con la colaboración del Servicio Catalán de Tráfico, algunas modificaciones en las carreteras próximas al Circuit para mejorar la circulación. Sin embargo, el comisario Pla ya tiene terminado un proyecto, que presentará las próximas semanas a la dirección del Circuit, con el fin de encarar poder funcionar mejor en la entrada y salida de los millares de vehículos que acceden a la zona durante el fin de semana de la F1.
Pla está convencido de que se puede hacer mejor y que hay que agilizar la entrada de los vehículos facilitando el acceso a los aparcamientos e incluso, cambiando la manera como se organiza la entrada en los aparcamientos, facilitando la entrada a los primeros coches que lleguen al Circuit e ir llenando los aparcamientos que están más cerca de las instalaciones y evitar tener gente, con vehículos, dando vueltas por los viales que dan al circuito, que es lo que genera colas y retenciones en el acceso. Las ideas claras y la experiencia, casi en todas las disciplinas policiales, del comisario Pla rezuman en la seguridad con la que habla y como explica, delante y detrás de la cámara, el dispositivo de los Mossos.
La seguridad del interior y el exterior del Circuit
Más allá del tráfico, los Mossos también se encargan de la seguridad en el interior y en el exterior del Circuit. En el interior, con agentes de paisano y agentes uniformados que patrullan la zona del público, y con efectivos de orden público, el Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) que se encargan de dar apoyo a los vigilantes privados en los accesos y también se encarga de evitar, a la recta del Circuit, posibles saltos en la pista. Pla recuerda que no se trata de un temor infundado. En dos anteriores grandes premios en otros países activistas contra el cambio climático han invadido la pista durante la vuelta de formación. Varios equipos del ARRO se despliegan, en el momento más crítico, cuando falta miedo poco por el inicio del Gran Premio, en la zona de salida.
Si bien el máximo momento de peligro está antes del inicio de la competición, los Mossos d'Esquadra se mantienen en alerta durante toda la carrera. Desde el Centro de Coordinación (CECOR) los agentes mantienen en todo momento contacto con todas las unidades desplegadas en la zona y se coordinan. Durante la carrera agentes de paisano de Información detectaron a tres personas que podían llevar una pancarta y que podrían estar preparando un salto en la pista. Agentes uniformados los identificaron con la colaboración de las imágenes aéreas de los drones policiales y finalmente se descartó la amenaza.
Los drones vigilan desde el aire
Los drones y la Unidad de Drones de los Mossos d'Esquadra, más allá de dar apoyo desde el aire a los agentes que trabajan a pie del suelo, también hacen dos funciones importantes en este dispositivo de gran envergadura. Las imágenes aéreas permiten al CECOR hacer vigilancia de los aparcamientos donde han quedado los millares de coches en que han traído a los aficionados hasta el Circuit. Desde el aire, haciendo pasadas, los Mossos pueden dar seguridad a los aparcamientos y desplazar los agentes de paisano para hacer las verificaciones necesarias o incluso, pillar y detener a los posibles ladrones. Durante los entrenamientos y la Pole del sábado, dos ladrones, los dos sudamericanos, fueron arrestados cuando después de ser detectados intentando robar en un coche, intentaron escapar atropellando a un agente de los Mossos d'Esquadra.
Al mismo tiempo, los drones, y el sistema de antenas Kuppel, permite también a la policía catalana dar seguridad aérea a la competición en dos líneas. La primera, para detectar posibles drones no identificados que pudieran ser una amenaza pra la seguridad. Y también, la segunda, teniendo en cuenta que el tráfico de helicópteros privados y de servicios de emergencia es muy elevado durante todo el fin de semana, la presencia de drones no identificados en la zona podrían convertirse en un peligro. Los Mossos instalan dos antenas Kuppel fijas en el interior del Circuit y dos antenas móviles más en el exterior con el fin de poder cubrir toda la zona.
Desde el CECOR, el sargento Mario Olivares monitora todos los movimientos de los drones de sus agentes y, al mismo tiempo, está atento por si Kuppel detecta la presencia de drones enemigos. Durante el domingo, el día grande del GP, los Mossos detectaron dos drones que despegaron de la zona de aparcamiento pero muy poco rato, que no les permitió llegar para poder interceptarlos. En cambio, no se detectaron en el interior del Circuit durante los tres días de competición.
El punto final: limpiar la pista
Los aficionados a la F1 en el Circuit de Catalunya tienen un aliciente más que solo ver pasar, a gran velocidad, los coches de Alonso, Sainz o Verstappen -que ganó la carrera con su Red Bull-; cuando finaliza la prueba pueden saltar a la recta de salida y celebrar con los pilotos la victoria y el podio. Más de 15.000 personas acceden desde las gradas a la pista.
Es una jugada que permite también descongestionar la salida de vehículos -algunos se empiezan a marchar, pero todavía tienes un grueso de gente disfrutando en la pista e intentando una foto o un trozo del Circuit para llevarse a casa- pero que tiene que acabar. Los Mossos, con la colaboración de la seguridad privada, son los encargados, con agentes del ARRO y bajo la dirección del comisario Pla y del inspector Jordi Moya de volver a limpiar la pista y maniobrar para sacar del interior a los millares de aficionados que no tienen prisa a marcharse. El ARRO se despliega desde las curvas de entrada y salida de la recta y mueven a los aficionados otra vez hacia las gradas.
Este año, sin embargo, esta maniobra, que es el punto final del dispositivo en el interior -quedará, en el exterior, descongestionar la circulación- se alargó más de lo que toca. Un error de la seguridad privada, con aficionados que saltaron a la pista del circuito fuera de la zona delimitada por agentes del ARRO complicó mucho esta limpiada final, uno maniobra que finalmente se alargó durante más de una hora y que agotó a los agentes que tuvieron que andar, retirando a la gente, contra dirección, por el interior del trazado de casi todo el primer tramo del Circuit.
Dispositivo al nivel de la F1
Este dispositivo es el mayor y uno de los más importantes que despliegan durante el año los Mossos d'Esquadra. Participan agentes de las comisarías de la región Metropolitana Norte más próximas a Montmeló, efectivos de Tráfico y agentes del ARRO de esta región, pero también unidades centrales como Información, Drones, Tedax y Canina. Que la F1 siga en Catalunya no depende de los Mossos d'Esquadra, sin embargo, y así también lo explican responsables del Circuit, que la seguridad no falle es un buen motivo para los organizadores internacionales de esta competición para confiar Catalunya y repetir.