Dos escuelas del Vallès Occidental renunciarán al concierto para mantener la segregación por sexo, según ha avanzado este miércoles Tot Sant Cugat. Se trata de las escuelas La Farga (de Sant Cugat del Vallès) y La Vall (de Bellaterra), que han informado a las familias de que segregarán por sexo, aunque esto los llevará a perder el concierto. Los dos centros, de la Institución Familiar de Educación, comunicaron a la conselleria que dejarían de segregar por sexo a secundaria en el 2022, después de que Educació anunciara que retiraría el concierto en los centros que lo siguieran haciendo. Ahora, sin embargo, la Institución ha comunicado que los dos centros volverán a ofrecer “educación diferenciada”. La pérdida del concierto supondrá dejar de ingresar el dinero público correspondiente, pero los centros prevén que el impacto sea el mínimo posible para las familias.
Así, ambas escuelas pasarán a ser completamente privadas a partir del curso 2026/2027. Para el curso 2022/2023, La Farga decidió aceptar chicas en la ESO para mantener la subvención, pero la realidad es que no se ha inscrito ninguna chica en esta etapa durante estos años. Dos años después, la escuela ha apostado por la segregación a todas las etapas y renunciar al dinero público. El director del centro, Miquel Riera, ha explicado a Tot Sant Cugat que la decisión “ha costado de tomar” porque “supone renunciar a la financiación pública”.
La segregación en La Farga
Riera también ha asegurado que, en los últimos años, han llevado a cabo “un plan de sostenibilidad para poder prescindir de estos recursos”. Es decir, que las cuotas de las familias aumentarán, pero que “el incremento no supone un volumen excesivo”. “Es un porcentaje bajo y nos posiciona al nivel de las concertadas del entorno”, ha añadido, además de apuntar que hay “una bolsa de ayudas” para familias que no tienen suficientes recursos.
El director ha afirmado que la gran mayoría de familias ha recibido muy positivamente la noticia, comunicada en una reunión del lunes pasado. “La escuela siempre ha optado por esta metodología, aunque ahora no está de moda”, ha argumentado, a la vez que ha defendido que es la “metodología que más se adecua” a sus objetivos “de atención personalizada y sacar el mejor de cada alumno, la excelencia académica y formación en valores y cristiana”. En un comunicado, el centro ha añadido: “La educación diferenciada es una metodología que a lo largo de más de 50 años de historia de la escuela ha dado muy buenos resultados, tanto desde el punto de vista pedagógico como en el crecimiento personal y social de los alumnos”. “Somos y queremos seguir siendo escuelas de familias, escuelas con calidad educativa, formación cristiana, educación en valores, atención personalizada y, también, educación diferenciada”, concluye la escuela, enfatizando que la segregación les permite ser “fieles” a su identidad y proyecto educativo.