Esta mañana el director general de la Policía, Pere Ferrer, ha citado en su despacho de la comisaría de Les Corts, en Barcelona, a los comisarios Eduard Sallent, actualmente jefe de los Mossos d'Esquadra, y a Alícia Moriana, jefa de la Región Policial Central, para entrevistarles en el proceso abierto para escoger al nuevo major de la policía catalana. Después de escuchar los dos proyectos y las respuestas, el director ha firmado el informe previo y ha propuesto que sea el comisario Eduard Sallent quien haga el curso de major en el Institut de Seguretat Pública de Catalunya (ISPC). Según ha podido saber ElNacional.cat, este mismo viernes Ferrer ha firmado el informe y lo ha hecho publicar en la red interna del cuerpo de la policía catalana. Resuelto este proceso administrativo, ahora Eduard Sallent tendrá que participar del curso y podrá ser nombrado oficialmente major. Será el segundo major en activo, un rango, el más alto de los Mossos, que compartirá con Josep Lluís Trapero, que es major desde 2017.

La Ley 10/1994 de la Policía de la Generalitat-Mossos d'Esquadra permite que haya dos personas que tenga el rango de major. Hoy por hoy solo Trapero tenía este rango, el de máximo mando de la policía catalana, si bien Eduard Sallent, siendo comisario, ejercía de cabeza del cuerpo y Trapero está apartado de la operativa como jefe de la Comisaría General de Evaluación y Servicios, con oficina en la comisaría de las Corts. Antes de Trapero, que fue nombrado con anterioridad a los convulsos meses del 2017 -atentado en la Rambla de Barcelona y Cambrils y el referéndum del Primero de Octubre-, el cuerpo había sido diez años sin major, desde la jubilación, el año 2007, de Joan Unió.

Josep Milán asumió la dirección operativa de los Mossos de 2007 a 2013, pero como comisario. Dejó paso, después, a Trapero, como comisario jefe del 2013 en el 2017. Después de ser nombrado major, sin embargo, por la aplicación del artículo 155 de la Constitución española después del intento fallido de independencia, fue destituido y fue nombrado, desde Madrid, Ferran López como jefe del cuerpo. Entre 2018 y 2024 varias jefes han asumido este cargo. Miquel Esquius, Josep Lluís Trapero, Josep Maria Estela y Eduard Sallent -que hoy ha sido escogido para ser nombrado major.

Reforzar el liderazgo de Sallent en la Prefectura

Ahora Sallent, como major, seguirá siendo el jefe del cuerpo. El rango de major, sin embargo, como se ha visto en el caso de Trapero, no te asegura ser el máximo mando operativo, pero sí que es duradero en el tiempo. Escoger el jefe del cuerpo es una prerrogativa del conseller de Interior y del director general de la Policía, en consonancia con el presidente de la Generalitat, que es, según el Estatuto de Catalunya, el jefe supremo de la policía catalana. El departamento de Interior ha decidido crear esta segunda plaza de major, que ahora asumirá Sallent, para reforzar el liderazgo del jefe del cuerpo y dar estabilidad al equipo de la Prefectura que lidera con la comisaría Rosa Bosch y el comisario Ferran López. La plaza, que contempla la ley, fue anunciada días antes que Pere Aragonès, después de no poder aprobar los presupuestos, convocara elecciones. Eso ha hecho que el proceso de elección del nuevo major se haya tenido que hacer durante la campaña electoral, si bien se ha podido acabar, este viernes, antes de los comicios, cuando el Gobierno todavía no está en funciones.

El major Sallent con el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, y el jefe de gabinete, Raúl Murcia / EP

Sin embargo, no se ha evitado que la oposición, con el exconseller Ramon Espadaler (PSC-Units) al frente, hayan criticado la creación de la segunda plaza de major. Fue Albert Batlle, director general de la Policía, ahora compañero de partido de Espadaler, quien el año 2017, con el referéndum al cabo de la calle, convenció Carles Puigdemont para nombrar Trapero como major. También los sindicatos de los Mossos d'Esquadra, sobre todo los dos mayoritarios, USPAC y SAP-SME-FEPOL, han criticado la idoneidad de esta convocatoria, en el tiempo de descuento de la legislatura.

La comisaría Alícia Moriana, que también había presentado su candidatura a ser major, ha presentado un recurso por impugnar la oposición, según ha avanzado Ser Catalunya; sin embargo, el proceso sigue en marcha y hará falta que se resuelva el recurso más adelante, tal como han explicado a ElNacional.cat fuentes de Interior, que también han explicado que se han desestimado las medidas cautelares que había pedido Moriana. Después del curso en Mollet se hará un acto de nombramiento formal de Eduard Sallent como major; será un acto solemne, pero discreto, que distará en lo que se hizo, el año 2017, en el patio del Palau de la Generalitat, cuando se nombró Josep Lluís Trapero.

El modelo de Eduard Sallent

El departamento de Interior que lidera el conseller Joan Ignasi Elena y la dirección general de Pere Ferrer son los que propusieron el año 2021 en Sallent como jefe del cuerpo y también los que hoy han propuesto al del Baix Llobregat como nuevo major. Desde Interior avalan la trayectoria de jefe del cuerpo y apuestan por su modelo de transformación que ha aplicado el casi año y medio que ya lleva al frente de la policía catalana. Durante este tiempo, destacan desde Interior, se ha reactivado la modernización del cuerpo con el despliegue de la comisaría general TIC y la región virtual, pero también el modelo de policía nacional, por tierra, mar, aire y ciberespacio, con la Policía Marítima y la Policía Aérea -la apuesta por los drones y la adquisición de un dron de ala fija para luchar contra el narcotráfico-, la apuesta por la tecnificación y poner la inteligencia en el centro del modelo policial y también la proximidad, con la apertura de nuevas comisarías y el refuerzo de las Unidades de Seguridad Ciudadana (USC) para mejorar la atención a los ciudadanos.

En la celebración del día de las Escuadras, en medio abril, el comisario jefe también avisó de que ahora habría que iniciar todos los cambios en la Comisaría General de Investigación Criminal (CGIC) para revertir los datos, malos, de criminalidad. Durante estos meses, también cuándo fue el número dos del cuerpo, con el comisario Estela al frente, Sallent ha dibujado la nueva estructura del cuerpo, el decreto de estructura de los Mossos, para pensarla con el horizonte 2030, creando nuevas áreas y reforzando las que ya había y que el actual contexto había dejado pequeñas.