Emotivo homenaje a la castellera herida en la diada de Sant Fèlix de Vilafranca del Penedès, horas después de la caída. La Colla Vella de los Nens de Valls, a la cual pertenece Mia —la chica que ha sufrido el accidente—, ha hecho un pilar de cinco por despedir la festividad de este año y el enxaneta ha mostrado en la plaza la funda de su casco. El gesto ha sido muy aplaudido por los presentes, que también han trasladado su apoyo a la niña, la familia y a los miembros de la colla.
En declaraciones en La Xarxa, uno de los miembros de la colla, Llàtzer Magrinyà, ha explicado que han tomado la decisión de hacer el homenaje "tan pronto como han llegado noticias de Barcelona que el TAC y las pruebas que habían hecho habían ido bien". "Necesitábamos saber que Mia estaba bien, o que no era más grave de lo que nos pensábamos. Con el hecho de saberlo ya hemos dicho 'bien, va, intentamos el pilar de ocho y que sea la alegría final'. No hemos salido de acabar de encajar el cuarto con las manillas y bien, lo hemos desmontado", ha relatado.
Antes, otro miembro de la colla, Joan Ibarra, también ha señalado a La Xarxa que un accidente como este "afecta muchísimo a la colla". Sin embargo, ha insistido en el hecho de que hace más de 230 años que hacen castells y más de 150 que van a Vilafranca. "Para nosotros hacer castells es la vida, es vivir, es sentir que formas parte de una cosa muy importante y que la historia que llevamos nos avala en todo lo que estamos haciendo. Venir a Sant Fèlix, llevar la camisa de la Colla Vella y seguir representando el hecho casteller es único y no habrá nada que pueda violentar esto", ha asegurado, antes de dejar claro que "cualquier persona que pueda poner en duda la seguridad de los castells va errada".
"Hemos demostrado en más de 200 años de historia, en más de 11.000 castells que se levantan cada día, en más de 15.000 castellers que participan día a día, año a año, en las plazas, que es una actividad extremadamente segura, pero que hay riesgo. Hoy hemos visto que había riesgo y que puede ser que pasen cosas. Estas cosas pasan", ha dicho Ibarra. En esta línea, el casteller ha reiterado que todo el mundo sabe "que hay un riesgo": "Los padres de los chiquillos sabemos que hay un riesgo cuando hacemos subir a nuestros niños. Es un riesgo que sabemos que es asumible. Yo empecé con 8 añitos y ahora ya tengo unos cuantos más y sigo haciendo castells. Hay pocas actividades en el mundo, yo diría que ninguna, que pueda englobar los valores y todo el sentimiento que tiene el hecho de levantar castells. Y que por muchos años sea".
El estado de salud de la castellera
En declaraciones en la ACN este viernes por la tarde, el jefe de la Colla Vella, Manel Urbano, ha reconocido que ha pasado "lo peor que puede pasar, que es que los chiquillos se hagan daño". Con respecto al homenaje, ha dicho que intentado acabar la actuación "dignamente", que es lo que la castellera creen que querría. Hoy por hoy, sin embargo, la prioridad es que la chica se recupere "bien" y "al máximo de rápido posible". "Habría sido la primera en querer hacer castells", ha explicado, a la vez que ha avanzado que a escala médica "las cosas están yendo con una cierta normalidad", aunque el pronóstico definitivo no se sabrá hasta "dentro de unos días":
La niña ha sido trasladada en helicóptero en estado grave pero estable al Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona y ha sido ingresada con una fractura de cráneo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde ha pasado la tarde de este viernes. Ha sido intervenida quirúrgicamente y se encuentra estable, según ha explicado la Colla Vella en un comunicado de este viernes noche. Los castellers han añadido que el pronóstico y la evolución de la menor no se podrán saber hasta que no pasen de 24 a 48 horas desde el momento de la atención médica.