Las excavaciones paleontológicas al yacimiento de las Casuchas, en Subirats (Alt Penedès), han puesto al descubierto restos de cocodrilo y rinoceronte de hace 16 millones de años. También se ha localizado el cráneo de un felino primitivo "único en Europa", explica el investigador del Instituto Català de Paleontologia y codirector del yacimiento, Isaac Casanovas.
Después de que en el 2019 se excavara por primera vez en el lugar después de casi tres décadas, la pandemia obligó a aplazar los trabajos el año pasado, que este 2021 se han podido reprender. El equipo encargado de los trabajos confía en poder extraer los restos localizados durante esta campaña.
El yacimiento
El yacimiento de las Casuchas fue el primero declarado Bien Cultural de Interés Nacional, el año 1995. Fecha de hace unos 16 millones de años y es uno de los principales yacimientos de esta edad que hay en toda Europa. Situado junto al Castillo de Subirats, fue excavado a principios de la década de 1990. "Esta zona era muy húmeda donde vivían animales, entre ellos cocodrilos, ciervos, lo que conocemos como perro-oso o, incluso rinocerontes", explica el codirector del yacimiento, el investigador Isaac Casanovas. "Es una zona muy rica, después de que se extinguieran los dinosaurios, aquí encontramos los primeros mamíferos que existieron", profundiza el también codirector Joan Madurell.
El yacimiento estuvo descubierto en 1989, pero sólo se excavó durante cuatro campañas. En el 2019, un equipo del Instituto Català de Paleontologia Miquel Crusafont reanudó la búsqueda al yacimiento, pero la pandemia obligó a aplazarlos el año pasado. Esta semana se han reanudado los trabajos, que cuentan con un equipo formado por 20 personas y que durarán unos quince días.
Los huesos
"En el 2019 prácticamente sólo pudimos limpiar y ha sido este año que hemos podido empezar a excavar, pero hay trabajo por décadas", explica Madurell. Aunque sólo se ha excavado una parte muy pequeña del yacimiento, se han descrito más de 40 especies de animales diferentes, incluyendo varias especies nuevas. Entre los hallazgos que ya son visibles, Casanovas destaca el esqueleto de un cocodrilo, huesos de varios ejemplares de rinoceronte y un cráneo felino primitivo "único en Europa".
La intención, explica Casanovas, es extraer el esqueleto de cocodrilo y los huesos de rinoceronte encontrados a lo largo de esta campaña. De aquí se trasladarán al laboratorio, donde se estudiarán con más profundidad. Lo que ve más complicado son los huesos de elefante que también se han localizado, ya que se encuentran a más profundidad. "Muy probablemente se tendrán que dejar para el año que viene", dice.