Los Reyes Magos volvieron a Ourense, como en todas las poblaciones del Estado, con aparente normalidad. Después de la pandemia del covid, que había obligado a modificar las dos anteriores cabalgatas, en esta ciudad gallega había más ilusión que nunca para volver a recibir a sus majestades, aunque con un primer pequeño escándalo, por el hecho que estos se pasearon en dromedarios en lugar de carrozas, como era habitual en este municipio. Esta controversia se quedó en una nimiedad cuando trascendió que el rey Baltasar de Ourense había sido condenado por abusos sexuales en dos ocasiones (2019 y 2022), según dos sentencias de los Juzgados de lo Penal 1 y 2 del mismo municipi. Además, Khalifa A.N., nombre de este Baltasar, se trata de una persona conocida en la ciudad, por lo que nadie entiende como este camarero condenado por abusos sexuales, la última vez en septiembre de 2022, ha podido acabar subido en un dromedario y saludando a todos sus vecinos "como si nada".
La oposición se ha unido para censurar estos hechos. Primero llegaron las críticas del Partido Socialista y del Bloque Nacionalista Gallego al alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, líder del partido Democracia Ourensana, y ahora, el grupo municipal del Partido Popular de Ourense ha reclamado que dimita por su responsabilidad en la designación de "un condenado reincidente por abusos sexuales" para hacer de rey Baltasar en la cabalgata de Reyes. Los populares, que facilitaron la elección de Jácome como alcalde en 2019 y han formado parte de su gobierno en distintas etapas a lo largo del presente y turbulento mandato, este miércoles han registrado una moción de urgencia para su debate y aprobación en el pleno del ayuntamiento de este viernes en la que exigen la renuncia del líder de Democracia Ourensana.
El Ayuntamiento no da explicaciones
En esta moción, argumentan que la legislación vigente en España exige la presentación de un certificado de penales a aquellas personas que participen en actividades con menores. Dicen que, precisamente, la cabalgata de Reyes "es una actividad multitudinaria" que concentra a miles de niños y niñas y, por ello, es extremadamente grave que uno de los tres protagonistas "fuese un condenado reincidente por abusos sexuales". Por ello, señalan que "sin entrar en cuestiones judiciales", lo que preocupa es la irresponsabilidad política de quien permitió que una persona condenada por este tipo de delitos fuese protagonista de un evento infantil y familiar. Pero no uno cualquiera, sino el más importante del año. Además, subrayan que el alcalde "ya contó con esta persona en alguna otra ocasión" porque, aseguran, es próximo a su círculo de confianza.
"El despropósito es de tal magnitud que el máximo responsable de este suceso tan lamentable, el señor alcalde, se niega a dar explicaciones", ha lamentado la portavoz popular municipal, Flora Moure, que recuerda que los grupos políticos han reclamado una junta de portavoces para saber lo que pasó y el Ayuntamiento aún no se ha pronunciado. "Negar las explicaciones que le exigen los representantes legítimos de la ciudadanía supone el remate de una situación vergonzosa que nunca debió suceder", critica el PP, que lamenta que Ourense vuelva a los medios de comunicación nacionales "por otra acción irresponsable del primer edil", que durante su mandato ha protagonizado más de un desliz similar. Ahora, solo se ha referido a la polémica por la presencia de dromedarios en la cabalgata, mientras que hace oídos sordos a las exigencias de sus rivales, que piden que dimita.