El Estado es ya el propietario del pazo de Meirás y depositario de los bienes tras 82 años en posesión de la familia Franco. Lo será en ambos casos de forma provisional, a la espera de una sentencia definitiva tras el fallo del Juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña que condenó a la familia del dictador a su devolución.
El acto de entrega de las llaves, por parte de la jueza Marta Canales, ha tenido lugar en el propio inmueble con presencia de miembros de la Abogacía del Estado y letrados de las partes personadas en la causa judicial contra la familia del dictador. No ha habido nadie en representación de los Franco, que este miércoles ya depositaron en el juzgado las llaves del inmueble, que pasa al Estado tras la ejecución provisional de la sentencia que les condenó.
La firma del documento de entrega se ha producido después de que técnicos de la Xunta que realizaron el inventario de bienes --un total de 697, entre enseres particulares hasta piezas de valor histórico y artístico-- verificaran, durante algo más de dos horas, que los que se recogen en el mismo están en igual estado que cuando se realizó la inspección ocular.
Con todo, la Abogacía del estado ha aclarado que dos de los bienes que constan en este inventario --la Casa de las Conchas y el hórreo anexo al inmueble-- no forman parte de los elementos reclamados por la administración.
Asimismo, se ha decretado la apertura de un plazo de 20 días hábiles para que la Administración General del Estado determine qué bienes deben ser entregados a los demandados.
De ellos, los Franco solo podrán retirar los estrictamente personales y los que no comprometan los futuros usos del pazo, que estarán vinculados, según avanzó la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, --tras una reunión con Xunta, Diputación de A Coruña y Ayuntamiento de Sada, además del consistorio coruñés-- a explicar "la verdad del paso de Franco con perspectiva democrática" y a reivindicar la figura de la escritora Emilia Pardo Bazán.