Los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre por estafar 50.000 euros a sus compañeros de trabajo. El acusado, un vecino de 34 años y de nacionalidad ecuatoriana establecido en Sant Esteve Sesrovires, conseguía los datos personales de las víctimas y solicitaba microcréditos para comprar aparatos electrónicos que posteriormente vendía en tiendas de compraventa.
El hombre -que fue detenido el pasado 5 de noviembre en L'Hospitalet de Llobregat- está acusado de cinco delitos de estafa y tres delitos de usurpación del estado civil. Después de pasar a disposición judicial el 8 de noviembre, el magistrado decretó su libertad con cargos con la prohibición de salir de territorio nacional.
La investigación se inició cuando agentes de la comisaría de Nou Barris tuvieron conocimiento de una estafa a un vecino del barrio. El autor del delito había pedido microcréditos utilizando los datos personales de la víctima y había hecho varias compras sin su autorización ni conocimiento. Gracias a la investigación se pudo identificar el presunto autor, un hombre con 21 antecedentes policiales por la misma tipología delictiva. Se trataba de un compañero de trabajo de la víctima que también había estafado a cuatro compañeros de trabajo más utilizando sus datos personales y bancarios.
El estafador siempre actuaba con el mismo modus operandi: conseguía los datos personales de las víctimas y hacía gestiones con la entidad bancaria para cambiar los datos de contacto de la víctima a su entidad financiera. Posteriormente, solicitaba microcréditos a entidades especializadas y utilizaba el dinero para realizar compras por internet de aparatos electrónicos. A pesar de las medidas de seguridad que tomaba la persona investigada, los mossos consiguieron averiguar dónde residía y detenerlo.
Al registrar el domicilio del arrestado, situado en el municipio de Sant Esteve Sesrovires, la policía intervino aparatos electrónicos nuevos como televisores de 60 pulgadas, cámaras y consolas. Además, también localizaron 750 euros en efectivo y diversa documentación relacionada con otros hechos similares.
Según fuentes policiales, el detenido habría vendido 21 aparatos electrónicos de alta gama, adquiridos con el dinero obtenido en préstamos a nombre de las víctimas, en tiendas de segunda mano. Estos nuevos datos harían aumentar considerablemente el beneficio económico del estafador, que se valoraba inicialmente en unos 50.000 euros. La investigación continúa abierta para averiguar si el detenido puede estar implicado en otras estafas similares.