Cada vez son más las armas que los funcionarios de las prisiones encuentran en el interior de las celdas y en espacios comunes de los centros penitenciarios de Catalunya. Armas que después pueden ser utilizadas para defenderse, pero también para atacar a otros reclusos o incluso, para atacar a los trabajadores de interior y de tratamiento, quienes tratan todos los días con los internos de unas prisiones, alertan los propios trabajadores, que están fuera de control por las políticas surrealistas del Departament de Justícia.
Los funcionarios siguen en pie de guerra a raíz del asesinato, la semana pasada, de una cocinera en Mas d'Enric. Lamentan las condiciones de inseguridad que sufren y la falta de contundencia por parte de la Administración para castigar a aquellas personas internas que se saltan los regímenes de conducta.
Más armas que nunca en las prisiones catalanas
En los últimos seis años, y según los datos que la propia consellera Ubasart explicó en el Parlament de Catalunya, en una pregunta parlamentaria, y tal como ha recuperado el periódico digital ElMón.cat, se han localizado 1.938. Lo que en el entorno penitenciario se conoce como "pinchos", armas de fabricación casera que permiten lesionar. Normalmente, las fabrican con objetos cortantes que pueden conseguir de otros usos o fabricados por los propios presos. De los datos que ya se han contabilizado, en el año 2022 se sacaron de circulación, con registros, casi 450 armas de este tipo de las prisiones catalanas, según los datos de la propia consellera Ubasart.
Los datos preocupan a los funcionarios de prisiones. Según las cifras de Justícia, en los últimos años se ha disparado el número de armas que los funcionarios encuentran en las prisiones de Catalunya. En el año 2017 se recuperaron 290 armas (la mayoría, 151, cuchillas). Los datos se han disparado en 2022, con estas casi 450, la mayoría en Brians 2 y también en el centro de Joves, en la Roca del Vallès. Justícia todavía no ha facilitado los datos de armas cortantes y objetos contundentes retirados de la circulación durante el año 2023.
ElNacional.cat ha tenido acceso a las imágenes de algunas de estas armas, las localizadas e intervenidas durante los últimos años en las prisiones de Catalunya. Los funcionarios denuncian que cada vez, sin embargo, es más complicado hacer registros en las celdas y que, incluso, si encuentran objetos prohibidos -armas, drogas o móviles- las direcciones del centro son muy laxas con las sanciones que aplican a los internos.
Las fotos de las armas de las prisiones de Catalunya
