Un grupo de científicos estadounidenses ha descubierto el motivo por el cual estás sufriendo inflamación intestinal. Los expertos apuntan que la clave está en la proteína Piezo1, la principal responsable de los movimientos involuntarios que hacen los músculos intestinales para digerir los alimentos. Los autores destacan que el hallazgo podría mejorar el día a día de las personas con estreñimiento, diarrea o inflamación intestinal.
Después de cada comida, los intestinos realizan una serie de contracciones y relajaciones para mover los alimentos. Durante mucho tiempo, los científicos han pensado que las responsables de hacerlo posible eran las células nerviosas del intestino, pero no es del todo así. El estudio demuestra que la activación del intestino se altera por el ejercicio, la presión y la inflamación.
La proteína Piezo1, la clave
Las conclusiones del estudio apuntan que la clave de todo está en la proteína Piezo1, llamada así por la palabra griega 'presión'. "Con el tiempo, podríamos estimular Piezo1 para acelerar la excreción, bloquearla para tratar la diarrea o utilizarla como una nueva diana para tratar la inflamación intestinal en pacientes con Enfermedad Inflamatoria Intestinal", ha explicado Ruaidhrí Jackson, profesor adjunto de inmunología en la Harvard Medical School y coautor principal del estudio.
Para realizar la investigación, los expertos tuvieron que analizar tejido intestinal de ratones bajo diferentes condiciones de presión. En uno de los experimentos observaron que los roedores modificados con inflamación intestinal que tenían una buena cantidad de la proteína Piezo1 defecaron con mayor rapidez que los roedores con la proteína desactivada.
Dicho en otras palabras, en las pruebas comprobaron cómo el intestino de los ratones con una presencia buena o normal de la proteína Piezo1 se contrajo y aumentó, provocando de esta forma una buena digestión. En cambio, los intestinos de los ratones a los que les quitaron la Piezo1 no se contrajeron bajo presión y acabaron provocando hinchazón y molestias digestivas a los animales, haciendo evidente que la anulación de la proteína empeoraba los síntomas de inflamación.
Un nuevo tratamiento en el horizonte
Los autores de las investigaciones se muestran optimistas y dejan abierta la puerta a encontrar nuevas maneras de modificar la actividad de Piezo1, un recurso especialmente valioso para combatir enfermedades intestinales. El estudio también ha ayudado a entender mejor el funcionamiento del sistema nervioso e inmunitario para mantener saludable y proteger el intestino.