Un estudio de la Universitat Rovira i Virgili (URV) investigará cómo afecta psicológicamente el desbarajuste ferroviario de Rodalies. El equipo del Departamento de Psicología de la universidad tarraconense analizará por primera vez el impacto que tienen la acumulación de retrasos, las cancelaciones, la falta de información y la incertidumbre a la hora de desplazarse en los pasajeros. La investigación, que se plantea como "pionera", se realizará a partir de los datos obtenidos de un cuestionario en línea para los usuarios del servicio. Serán entre 60 y 80 preguntas orientadas a determinar si se observan síntomas de ansiedad, depresión, estrés u hostilidad.

Los investigadores activarán los cuestionarios este marzo y confían en tener los primeros resultados en junio. El coordinador del estudio, el investigador en psicología Sergi Martín-Arbós, explica que los miembros de la Plataforma Dignitat a les Vies se pusieron en contacto con la universidad el pasado diciembre para buscar respuestas a su "malestar", derivado de la situación ferroviaria en Catalunya. "Después de explicarnos cómo se sentían, vimos clara la necesidad de evaluar el impacto psicológico que todo eso está provocando", ha aseverado Martín-Arbós.

El equipo de investigadores confían en que conseguirán una muestra próxima al millar de respuestas, el objetivo que se han marcado para considerar rigurosos los resultados. Todo ello, a raíz del volumen de incidencias en los trenes en los últimos años y, sobre todo, por el malestar derivado de los episodios de los últimos días, que han sido toda una semana negra para el servicio ferroviario, con el colapso reiterado de toda la conexión Barcelona-Tarragona por avería en la catenaria —incluyendo el desalojo de trenes y la escena de personas caminando por la vía—, el fallo de las pantallas y los megáfonos o incluso la caída de una piedra de grandes dimensiones contra un tren en la R3. "Buscamos a personas afectadas, pero también necesitamos que participen aquellas que no utilizan el tren o que lo hacen esporádicamente, para comparar las respuestas y extraer conclusiones válidas", ha apuntado el responsable del estudio.

Llamamiento a participar

La investigación se efectuará a partir de los datos obtenidos de un cuestionario que tendrá entre 60 y 80 preguntas y que variarán en un recorrido en función de las respuestas. Irán orientadas a determinar si entre las personas que sufren las afectaciones ferroviarias se observan síntomas de ansiedad, depresión, somatizaciones —manifestaciones físicas de la ansiedad o el estrés— u hostilidad, entre otros trastornos. "Solo necesitamos que nos digan que quieren participar y una vez activemos el cuestionario nos pondremos en contacto con ellos", ha subrayado al investigador, que hace un llamamiento a participar. El formulario de preguntas estará abierto a cualquier persona que viva en Catalunya, ya que en la fase de análisis de datos los resultados se fragmentarán también en función de las distintas líneas de transporte. "Preguntaremos qué modificaciones se han tenido que hacer por el problema de los trenes, como cambios de trabajo, traslados de domicilios o tener que utilizar el tren de alta velocidad, con el gasto extra que ello conlleva", ha detallado Martín-Arbós.