La justicia que afecta directamente a los ciudadanos está casi desnuda en Catalunya. Al menos esta es la conclusión después de ver la reclamación hecha por la sala de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) al Consejo General del Poder Judicial (CGP): pide 30 nuevos juzgados y 11 plazas de magistrados para este año. La última palabra la tiene el Ministerio de Justicia, que es quien aprueba la nueva planta judicial en función de su presupuesto. Nunca se concede todo. El año pasado se pidieron 10 nuevos juzgados a Catalunya. El Departamento de Justicia, por su parte, reclama al ministerio más dotación económica para crear los juzgados nuevos, ya que con las nuevas tecnologías la partida se considera muy escasa. El ministerio, que encabeza Pilar Llop, tampoco ha respondido todavía a la petición del TSJC, con el apoyo del CGPJ y de todas las asociaciones judiciales en Catalunya, para que se pague un complemento económico a los jueces para que se queden más tiempo en territorio catalán, ya que pasado el primer año obligatorio de ejercer en el primer destino, la mayoría solicita el traslado más cerca de su ciudad de origen.
En concreto, la sala de gobierno del TSJC, que preside Jesús Maria Barrientos, en el acuerdo del 22 de marzo pasado, afirma que la reclamación de nuevos juzgados se ajusta a las cargas de trabajo fijadas como óptimas con la entrada de asuntos, acordada por el Poder Judicial y el Ministerio en el 2018, aunque añade que asume que la creación de nuevos órganos judiciales está vinculada a las disposiciones presupuestarias. Así, precisa que las necesidades más importantes se concentran en la Audiencia de Barcelona, donde pide 10 plazas de magistrado, uno para cubrir las secciones civiles 12 y 18, y un juez para cada sección penal (2., 3,5,6, 7,8, 9, y la 10). La sala del gobierno de TSJC expone que hace años que los 58 magistrados de la Audiencia de Barcelona tienen cargas de trabajo que superan los módulos fijados por la ley: son 300 asuntos por magistrado y ellos asumen unos 390. Y el undécimo magistrado para la sección civil 2.ª de la Audiencia de Lleida.
Juzgados
Con respecto a los 30 juzgados, el TSJC los solicita en: 8 juzgados en Barcelona ciudad (4 de primera instancia, una de capacidad y estado civil); 13 juzgados en la demarcación de Barcelona, y de estos 6 de Primera Instancia (2 en Badalona, 1 l'Hospitalet del Llobregat, 1 Granollers, 1 Terrassa y 1 a Mataró, familia) y 7 juzgados de Primera Instancia e Instrucción (1 en Cornellà de Llobregat, 1 en Esplugues de Llobregat, 1 en Sant Feliu de Llobregat, 1 en Santa Coloma de Gramenet, 1 en Cerdanyola del Vallès, 1 en Rubí, 1 Vilanova i La Geltrú). Además, solicita 3 juzgados en Tarragona ciudad (1 juzgado de Mercantil 1 de Primera Instancia, 1 de Social), mientras en la demarcación de Tarragona se solicita 1 juzgado de lo Social en Reus. Y tres juzgados en Girona ciudad (1 juzgado de Primera Instancia, 1 mercantil y 1 Social. En la demarcación de Girona se pide 1 juzgado de Primera Instancia e Instrucción en Figueres. Y finalmente, en Lleida se pide un nuevo juzgado de lo social.
Desde el Departament de Justicia, que encabezada Lourdes Ciuró, también se ha pedido con las asociaciones de comerciantes que se reabran el segundo juzgado de guardia para hurtos en Barcelona, cerrado el año pasado. Justicia proponía reactivarlos cada año durante cuatro meses en verano, cuando hay más turistas que pueden sufrir hurtos y robos, mientras la junta de jueces de Barcelona solicita que funcionen al menos seis meses cada año. El Poder Judicial y el ministerio tienen que responder.
Falta de jueces
Leer los acuerdos de la sala de gobierno del TSJC es comprobar como los jueces y magistrados hacen lo imposible para intentar descolapsar los juzgados, y constantemente se piden refuerzos puntuales de jueces, las llamadas comisiones de servicio, para ir cubriendo el trabajo de una justa plantilla judicial, aparte de su histórica movilidad y falta de vocaciones en Catalunya. Las últimas peticiones de apoyo son de los juzgados Terrassa y de los de Martorell. El año pasado, de los 188 nuevos jueces que concluyeron su formación en la Escuela Judicial, 74 tenían que cubrir plazas vacantes en Catalunya. El enero pasado, en su visita a Barcelona, la ministra de Justicia aseguró que el complemento para jueces y otros funcionarios que ejercen en Catalunya "está en estudio" y que había encargado un informe al TSJC, pero fuentes desde el alto tribunal catalán dijeron que no tienen ningún encargo concreto. El complemento de destino se aplica actualmente en el País Vasco, Canarias, Baleares, Ceuta, Melilla y la Vall d'Aran. Según datos del Departament de Justicia, en la actualidad en Catalunya hay una plantilla orgánica en la administración de Justicia de 9.464 funcionarios, de los cuales 849 son jueces y magistrados y 397 fiscales.